Madrid, escenario de cine
Hay muchas rutas y formas de conocer Madrid , por eso cada vez siempre es nuevo. Quizás es esto lo que atrae, todos quieren retratarlo los antes de que cambie, antes de que desvanezca, antes de que mueran las historias y pasen las épocas, las modas. Variación XXI te descubre los escenarios de cine más madrileños de tus películas favoritas.
Cartel de Schweppes, donde Santiago Segura se cuelga en El día de la bestia/Teresa Rojas
Historia
Congelar la ciudad cosmopolita y encerrarla entre nuestras retinas tal y como estaba la mañana del 1 de enero de 1980 cuando se cruzaban las vidas de miles de personas por Sol, tal y como lo hacen el 5 de mayo de 2014. Y para lograrlo hay que contar una historia.
Así, Madrid desde que en 1925 se rodara la primera película, ha acumulado a sus espaldas millones de film dirigidos por nombres propios como Almodóvar , Luis Buñuel , Amenábar… Pero no se puede abarcar todo, por eso como si de Nueva York se tratase, Variación XXI te acompaña por una ruta que no durará más de una tarde y donde se puede disfrutar del escenario de las mejores historias.
Comenzamos a andar …
Calle Gran Vía, donde más películas se han grabado/Teresa Rojas
El punto inicial no podía ser otro que el centro de Madrid. Es el séptimo arte el que ha mostrado la imagen más terrorífica sin sangre, ni cadáveres: la Gran Vía desierta y César corriendo desesperado, intentado creer que su vida no es un sueño que puede controlar en Abre los ojos. Otra mítica escena es la de Santiago Segura colgando del cartel de Schweppes, en El día de la bestia.
Así parece un lujo pasear por la Gran Vía llena de transeúntes y bocinas. Curiosamente muchos madrileños encuentran la tranquilidad en esta calle tan viva, pues es una forma de desconectar y perderse entre la masa. De Callao bajamos por la calle Preciados hasta Sol. Aquí se grabó la primera película sonora. De esta plaza lo más conocido, cinematográficamente hablando, es el desaparecido cartel de El Tío Pepe y el Km 0. Encuentra este punto igual que en la comedia que tiene su nombre.
Los personajes de Madrid
Hay mucha literatura y fantasías sobre el km 0 de Madrid: la ciudad donde se cruzan las historias, donde se puede volver a empezar… pero cuidado con cómo hacerlo. Está idea romántica se refleja en el film Km cero con muchos matices. La acción sólo dura un día.
14 personajes se citan en este punto, pero sus historias acaban con protagonistas distintos a los que esperaban. Marga se cita con un gigolo. Después de acostarse, empieza a sospechar que podría ser el hijo que abandonó. Roma es una adolescente enamorada de Mario, el novio de su hermana Amor. Mario trabaja de camarero en un bar donde se juntan todas las historias. Al final Amor se encuentra con un novio de la infancia… Confluyen más tramas con los demás personajes, que están llenas de vidas entrelazadas y casualidades. Igual que en la realidad. Y qué mejor escenario que Sol, donde al minuto se cruzan cientos de caras anónimas con una persona y una historia detrás.
Al final de la madrileña calle del Arenal se encuentra el pasadizo de San Ginés. Por él deambuló José Sacristán en La Colmena, la adaptación de la obra de Cela ambientada en el Madrid de la posguerra. Fernando Fernán Gómez eligió este mismo lugar en su versión de Ninette y un señor de Murcia. Si se pasa por allí, no se puede desaprovechar la oportunidad de ir a la famosa Chocolatería de San Ginés. A pesar de estar situado en pleno centro de la capital, muchas personas no conocen este pasadizo que desemboca en la calle Mayor.
La plaza Mayor de Madrid/Teresa Rojas
La plaza mayor es un lugar perfecto para disfrutar de Madrid. Aquí se puede revivir el drama de Los amantes del círculo polar. Estos se sientan en el mismo bar pero no se ven. Anna habla con una cara conocida pero no es la de Otto, sino la del profesor de este con el que comienza una relación a partir de ese encuentro. Además, Otto decide en ese momento hacerse piloto. Esta escena es clave, ya que sus destinos se cruzan en este punto exacto y toman caminos diferentes.
También aparece en una de las últimas escenas de La flor de mi secreto. En la plaza, Ángel le recuerda a Leo la primera vez que se vieron. Fue en medio de una manifestación de estudiantes de medicina. Los estudiantes vestían de blanco y ella de azul. La Plaza Mayor está desierta, parece un decorado.
De aquí Variación XXI baja por la calle Sacramento para llegar al Viaducto de Segovia. Así se llega a la última escena de este recorrido. En la película Matador de 1896 Diego Montes, protagonizado por Nacho Martínez, persigue a María Cardenal por toda la capital. Y la encuentra en este puente suicida.
También es clave en Los amantes pasajeros. Ruth circula en su bicicleta por la Calle de Segovia y un móvil cae en su capacho. Este es el teléfono de Alba, quien se va a suicidar por culpa del antiguo amante de ambas mujeres.
La otra cara de Madrid
Vista lateral del puente de los suicidas/Teresa Rojas
Este viaducto no fue elegido por los directores de las películas al azar, sino que tristemente principales sitios en que los suicidas se mataban. Incluso un actor especialista murió al rodar la escena de un suicidio. En la década de los noventa, cuatro personas al mes terminaban con su vida en este puente. Pero no todas las historias de este puente son malas. El mes pasado un cura y un repartidor evitaron que una persona se tirará, poniendo su propia vida en peligro al saltar las vallas. De película.
Para acabar, como todas las grandes producciones, Variación XXI le ha puesto a este reportaje una banda sonora cantada por Ismael Serrano, Quique González, Pereza… Y como no, Joaquín Sabina, que escribió la frase que han debido pensar todos los directores de estos film: “Yo me bajo en Atocha, yo me quedo en Madrid.”
Hablando de cine
Variación XXI ha entrevistado a Laura Bayod, estudiante de Realización e Iluminación de cine para hablar sobre el panorama actual del cine español.
En resumen, un paseo para conocer las calles madrileñas como escenarios de grandes películas del cine y obras creadas por algunos de los mejores directores de la gran pantalla. Todo un lujo vivir en la ciudad donde algunas de las principales calles de la capital han sido set de rodaje, y quién sabe, si hay suerte, quizás la próxima vez que pasees por una de ellas te encuentres disfrutando del rodaje del próximo estreno de cartelera.
