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periodismo universitario en internet

La otra cara de la compra-venta en Internet

España es el cuarto país europeo que más dinero gasta en compras online con cerca de 13.000 millones de euros anuales, solo superado por Alemania, Inglaterra y Francia. El 32% de la población española asegura haber realizado al menos una compra a través de la web en el último curso, cifra que sigue una tendencia al alza año tras año gracias a la cada vez mayor accesibilidad a Internet, la revolución de los smartphones, las ofertas exclusivas y a iniciativas como el denominado “Ciberlunes”. Pero esta expansión del comercio electrónico atrae a partes iguales a consumidores ávidos por encontrar los mejores precios como a los amigos de lo ajeno, ya sean personas adultas o adolescentes.

Casi 11 millones de españoles compraron por Internet en 2013

Casi 11 millones de españoles compraron por Internet en 2013

Pero hecha la ley, hecha la trampa. En Internet, como en cualquier otro ámbito, existen fraudes de los que poca gente se escapa. Las más habituales son ofertas de trabajo falsas, oportunidades de negocio que nunca se concretan o robos a cuentas corrientes a través de las tarjetas de crédito; no obstante los “ciberdelincuentes”, como la tecnología, se actualizan e idean nuevas técnicas para engañar a los usuarios. Algunos de los timos más peligrosos y a la vez más desconocidos son el pharming y el phishing. El primero consiste en crear páginas web falsas aunque idénticas a las originales para recabar datos personales y después utilizarlos en compras online; mientras que el phishing ofrece productos, habitualmente vehículos de alta gama, a un coste muy por debajo de su valor de mercado.

Como es el caso de Aurora una joven que adquirió recientemente unas entradas para la Final del Mundial de baloncesto celebrado en Madrid. La joven relata que “las entradas en la página oficial de FIBA se agotaron muy rápido” y tras la decepción de esta las encontró en una web de venta de entradas “entré en ‘Ticketbis’ y pude comprarlas”. Su sorpresa se produjo cuando quiso entrar junto a su padre el día del partido y las entradas no valían, “nos acercamos a la taquilla y había mucha más gente con el mismo problema” y en ese lugar les explicaron que numerosas páginas habían comprado entradas y las habían puesto a un precio superior “al enterarse la FIBA nos las anularon y las volvieron a sacar a la venta”.

Los vendedores también sufren estafas

En la otra cara de la moneda los vendedores que utilizan la web como plataforma para hacer negocios también pueden ser víctimas de este delito. Esta es la situación con la que se encontró Rebeca cuando quiso vender su PlayStation 4 a través de un famoso portal de artículos de segunda mano. Una vez puesto el anuncio y haber encontrado a un posible comprador, comenzaron las negociaciones. “Acordamos un precio justo para los dos, cómo sería el método de pago y el envío del paquete”, asegura la joven. La videoconsola llegó a su destino, pero el dinero nunca llegaría. “Pasaron varias semanas sin que me llegase el dinero, tampoco contestaba a mis e-mails”.

Los hackers hacen su propio agosto en la red - Grupo 11

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No te dejes estafar

1. Los precios excesivamente bajos pueden ser un motivo de alerta. Además se debe exigir siempre una factura detallada y revisar las condiciones del contrato.

2. Los anuncios cuyos datos de contacto hagan referencia a países extranjeros (e-mail, número de teléfono, dirección de referencia, etc.).

3. La mala redacción del anuncio, la falta de datos de contacto o la falta de calidad en las fotos de los productos restan credibilidad a la oferta.

La policía intenta paliar este problema - M. Interior

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4. Asegurarse de los gastos de envío y cuáles son los plazos de entrega del producto. En ocasiones se utilizan empresas de transporte que no existen.

5. Cuando el producto llegue a nuestras manos se debe comprobar que está en buenas condiciones y que cumple con los requisitos establecidos.

Casos como estos ocurren constantemente en nuestro país, un estudio de la Asociación de Internautas desvela que casi nueve de cada diez usuarios españoles de Internet ha recibido algún tipo de bulo en su correo y un 6,5% afirma haber sido víctima de una estafa en la red. De hecho, la cifra sube hasta el 37% entre los internautas que conocen a alguien que ha sido estafado en la red. Para evitar este tipo de casos tanto la Guardia Civil como las asociaciones de consumidores aconsejan a los consumidores como los ciudadanos pueden realizar sus compras  de forma segura por la red: asegurarse que la barra del navegador se encuentra en el modo de navegación segura, activar los protocolos de seguridad de las tarjetas de crédito, utilizar plataformas de pago que permitan reclamaciones en caso de disputa entre las partes o  evitar utilizar redes Wi-Fi públicas.

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