¿Hay igualdad en el mundo del cine?

Es posible que sigamos sumidos en una sociedad patriarcal donde la imagen de la mujer aún no ha superado el rol que le lleva años imponiendo la sociedad. Esto se ha manifestado siempre a lo largo de la historia en todos los artes y el cine no iba a ser menos.

Entonces, ¿cuál es la situación de la mujer en el mundo del cine? El cine nació en 1895 en París de la mano de los hermanos Lumiére y la primera mujer directora de cine fue la francesa Alice Guy. Toda una pionera que se dedicó al cine prácticamente desde su aparición. En España las precursoras fueron Helena Cortesina y Rosario Pi. La primera se inició en 1921 con “Flor de España o la leyenda de un torero”, la segunda es conocida por ser la primera directora del cine sonoro español en 1932 con “¡Yo quiero que me lleven a Hollywood!”.

Mujer enfocando con una cámara / quientelohacontado.com

La situación actual en datos

Según una investigación llevada a cabo por el Centro para el Estudio de las Mujeres en Televisión y Películas de la San Diego State University de las 250 películas más taquilleras de Hollywood  tan solo el 7% fueron dirigidas por mujeres. Los datos no son tan bajos en otros ámbitos del cine: el 23% en producción, el 19% en producción ejecutiva, el 18% en montaje y el 11% en guion. ¿Puede ser que las mujeres no quieran dedicarse al cine? Parece ser que ese no es el problema ya que en las principales escuelas de cine entre un 33 y 50% de los estudiantes son mujeres.

En España los datos son similares: tan solo el 8% de las películas son dirigidas por mujeres. La Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA), con más de 200 mujeres profesionales, nació para cambiar esta situación. Para ello organizan encuentros, estudios, muestras y tertulias. El Encuentro Internacional de Mujeres Cineastas Europeas o el II Encuentro Internacional CIMA en Santiago son algunos ejemplos. Aun así todavía queda mucho trabajo por hacer actualmente más de la mitad de las mujeres españolas sólo han dirigido una película en los últimos 10 años.

Cines Callao / Variación XXI

En el campo de la televisión los datos parecen más positivos. En los últimos años ha aumentado el número de mujeres productoras, directoras o realizadoras y guionistas en las series de ficción e incluso hay más jefas de equipo. Pero aún son pocas en comparación con los hombres. En los equipos directivos de todas las cadenas alcanzan un 20% y en los puestos de mayor responsabilidad como presidencia tan solo un 5,71% es ocupado por mujeres.

Los datos son similares en lo referente a festivales de cine. En los principales festivales nacionales como el de San Sebastián, Málaga y Valladolid apenas el 12% de los miembros de los comités seleccionadores son mujeres.

Roles femeninos en el cine y la televisión

Lo que vemos en las pantallas suele ser, en muchos casos, un reflejo de la sociedad en la que vivimos. Cuando se representa a la mujer o al hombre en determinados roles no es casualidad. Es por eso que en la historia del cine se ha repetido infinidad de veces el rol del hombre fuerte y la mujer salvada por éste. Es un clásico. Un buen ejemplo de esto son las películas de Disney, en las cuales en muchas ocasiones el personaje femenino suele ser una dama o princesa en apuros que necesita la intervención del príncipe para alcanzar su bienestar.

En los personajes femeninos aparecen numerosos estereotipos como el de la mujer como objeto de deseo, la mujer que busca a su príncipe azul, la mujer malvada o la mujer que cumple con su papel social. No obstante, este tipo de roles en la actualidad están cambiando.

Cartel de la película ‘Mulán’

Encontramos representaciones en las que el papel femenino cambia. Una de las primeras películas de animación que representó a la mujer en el papel de heroína  fue ‘Mulán’ producida por Disney en 1998. Otro ejemplo es la película  ‘Frozen’ (2013), en la cual se rompe con el esquema “chico salva a chica” y es la  hermana de la protagonista la que interviene en la salvación.

También hay series televisivas como ‘Sexo en Nueva York’, en las cuales se rompen ciertos estereotipos aunque se mantienen otros. Aparece una mujer insertada en el mundo laboral e independiente pero también una mujer adicta a las compras.  Además se refleja a una mujer mucho más libre en lo referente a su vida sexual. En los últimos años aparecen numerosos ejemplos de ello en películas y televisión.