Pages Navigation Menu

periodismo universitario en internet

El graffiti, un arte incomprendido

El graffiti es libertad de expresión en estado puro, no importan las leyes ni qué puede hacerse o no; importan las superficies, los colores y la libertad del arte sin censura. Para este reportaje contactamos con un graffitero de la old school que nos contó la esencia del graffiti, aportando alguna imagen de sus trabajos personales.

El arte es un arte que está de moda, de hecho el conocido escritor Arturo Pérez Reverte presentó el pasado 23 de Noviembre “El Francotirador paciente”, su última novela. Un libro que profundiza en los matices de esta forma de expresarse y atenta contra los prejuicios hacia el mundo del graffiti  juzgándolo de acto vandálico.

 

 

Durante años usado por los jóvenes como arma para revelarse contra lo establecido, en épocas en las que se quería llamar la atención sobre algo y no se contaba con la rapidez y accesibilidad que da Internet hoy en día. En Alemania, La Rosa Blanca, un grupo de estudiantes empezó a manifestar su rechazo a Hitler y los nazis mediante pintadas y panfletos por toda la ciudad, hasta su detención. Años más tarde, en las revueltas estudiantiles en Francia los jóvenes usaban la técnica del pochoir (graffiti hecho con plantilla precursor del actual stencil) para hacer llegar su mensaje a todo el país.

graffiti en calles

Graffiti de Madrid cedido por entrevistado en el reportaje.

Por el impacto visual que genera, el graffiti es un medio muy poderoso para representar ideologías, enviar mensajes o reivindicar temas de interés social; expresando ideas que pueden ser un mensaje político, una queja o incluso una burla o simplemente buscar causar admiración en aquellos que disfrutan grafiteando. Hoy en día la evolución del graffiti le ha permitido entrar en galerías de arte, evolucionando y creando un movimiento underground sólido, no regido por modas, por todo el mundo. Este tipo de “arte” ya forma parte del paisaje urbano en prácticamente todo el mundo, pero es cierto que no siempre son tan reivindicativos ni tan expresivos. En muchas ocasiones los graffitis son simples firmas sin adornos, color o mensaje, plasmados en edificios, vagones de metro o carreteras, estas firmas son por las que se acusa de vandalismo a los grafiteros, no todo es arte y no todo vale.

Una muestra del arte urbano que se encuentra en las calles.

Foto cedida por el autor.

Expresarse sin censura y sin límites, mostrando a todo el mundo  tu obra, eso es el arte del graffiti, pero hay que transmitir algo que merezca la pena ser visto, no es simplemente adornar una pared con color, esto va más allá. Dentro de la intolerancia hacia el grafitero, las nuevas generaciones ven algo más; se puede generar un gran impacto mucho mas profundo que con medios tradicionales, generando distintas sensaciones y sentimientos según quién lo vea. Se convierten en un medio para comunicarse más cercano y más humano, al fin y al cabo, está hecho a mano en un lienzo que pueden ver una gran cantidad de personas cada día. Es un arte que emana libertad.

 

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *