El humor como religión: La Iglesia Patólica de Lavapiés
Acudir a misa un domingo resulta un tanto diferente en la Iglesia Patolica. Desde el Paticano, su “templo” en el madrileño barrio de Lavapiés, el cómico Leo Bassi predica la extravagante religión. El patolicismo sacraliza el humor y la risa como la expresión más alta del intelecto humano. Un patito de goma es su dios; la humildad, el optimismo y el espíritu lúdico, sus valores fundamentales. Quisimos saber más sobre este extraño fenómeno que desde hace algo más de dos años ha levantado la curiosidad de la gente y sobre todo, polémica.
Una religión sin dogmas
Esta “religión” surge en diciembre de 2012. Su actividad se puede resumir en misas semanales, impartidas por Leo Bassi en Lavapiés. Además, cada misa o celebración suele estar relacionada con hechos, fenoménos o personajes relevantes tales como el Pequeño Nicolás, Podemos o el atentado contra Charlie Hebdo. El Dios Pato representa valores fundamentales como la humildad, el optimismo y el espíritu lúdico, reivindicando a su vez el derecho a la burla como acto trascendental. Esta curiosa iglesia se considera a si misma “hija de la ilustración” y defensora de la duda como escudo contra los oscurantismos, totalitarismos o las supersticiones. Ellos mismos describen su dogma como la ausencia de dogma, cada fiel es libre de proponer su versión de la iglesia con la única condición de hacer reir.
Miles de seguidores en las redes
Cada semana la Iglesia Patólica reúne en su “santa sede” a decenas de personas, aunque su alcance no termina en la calle: cuenta con 23.000 “likes” en su página oficial de Facebook y casi 40.000 seguidores en Twitter.
Otra de las razones de su éxito es la variedad de actividades, que no acaban en las homilías que realiza, sino que toma otras tradiciones católicas como pueden ser las bodas, amoldándolas a sus valores humanistas con un claro enfoque humorístico, por lo que no es de extrañar presenciar la boda de una mujer con su perro o el nombramiento de el Pequeño Nicolás como obispo de su religión.
Cruzada contra el humor. Ataques y polémicas
Leo Bassi siempre ha sido criticado por la religión católica y la ultraderecha española debido al enfoque crítico de su discurso. En el año 2006 sufrió un intento de atentado en el Teatro Alfil, cuando representaba su obra “La Revelación”, en la que criticaba el oscurantismo de la Iglesia. Un artefacto explosivo fue colocado al lado de su camerino, el cual no llegó a
estallar gracias a que fue descubierto antes de que empezara la representación. En la sala se encontraban cerca de doscientas personas.
Este no ha sido el único percance, ya que el cómico responsable de esta corriente “religiosa” ha sufrido ataques y manifestaciones desde su creación, por parte de colectivos religiosos y políticos. Ahora que el derecho a la libertad de expresión está en boca de todos, debido a los recientes acontecimientos en los que un grupo terrorista islámico asesinó a doce personas en la sede de la revista satírica Charlie Hedbo en París, nos hace plantearnos que la radicalización está presente en la mayoría de las religiones, y que los fanatismos no sólo se encuentran fuera de nuestras fronteras.
Leo Bassi es inmortal