Hare Krisna: “De ser querido a ser ignorado”

Son muchos los prejuicios y pocas las certezas. Es tal la desinformación, que decidimos desplazarnos unos pocos metros al corazón de Malasaña a conocerles. Pasamos un día con los Hare Krishna. Una filosofía que se comenzó a extender más allá de las fronteras de la India en la década de los 70, de la mano de su fundador Srila Prabhupada. Estados unidos fue la cuna de esta religión que, aunque aparentemente joven, sus escritos se remontan a cientos de años. Hoy se considera una religión minoritaria que ha pasado por tres grandes “fases” en cuanto a la percepción social.

Hubo un primer momento, de iniciación, en el que la filosofía Hare Krishna se relacionaba con el movimiento hippie y el fenómeno de la contracultura, algo que, sin lugar a dudas, ayudó a su popularidad y aceptación social. Una segunda etapa germinó con el escándalo por delitos aislados de algunos de sus integrantes. Los medios, rápidamente dieron la alerta y muchos fueron los que calificaron la religión de “secta” o fanatismo. La tercera y última fase, afirma Janardan, es la del olvido, pues la “gente ya no sabe ni lo que somos”.

En Madrid el movimiento Hare Krishna comenzó a difundirse a principios de los años 70, en plena dictadura franquista, y fue evolucionando paulatinamente. En 1985 se asentó en torno a una finca en Guadalajara y a partir de ahí se desarrolló en distintos centros en toda España.

¿Qué implica ser Hare Krisna?

Hare Krisna es el nombre que comúnmente ha recibido el Vaisnavismo (o visnuismo) por los cánticos que realizan sus fieles en honor a Vishnu, uno de los tantos nombres que recibe Dios dentro de la cultura védica. Según la tradición de este movimiento existen cuatro principios fundamentales alrededor de los cuales toda persona, practicante o no, ha de basar su vida: Compasión o Misericordia, Limpieza, Veracidad y Austeridad.

Para cumplir con esto, los fieles toman cuatro votos regulativos en los que se relacionan elementos de la vida terrenal con el servicio a Dios.
– Vegetarianismo: Está relacionado con la Compasión y la Misericordia, ya que no creen que exista diferencia entre el alma animal y el alma humana.
– No ingesta de intoxicantes: Está relacionado con la Austeridad y la Limpieza, pues supone que uno es plenamente consciente de sus actos en todo momento.
– No sexo ilícito: Está relacionado también con la Austeridad y la Limpieza. Sólo se mantendrán relaciones dentro del matrimonio con el único fin de procrear.
– No juegos al azar: Relacionado con la Veracidad y la concepción de que la vida no tiene un fin material.
Parte fundamental de la vida espiritual de un Hare Krisna está relacionada con el canto que se realiza 16 veces al día, ya que supone la purificación y la limpieza del alma. El Mantra completo se dice que tiene que cantarse con el sentimiento de un niño llamando a su madre.

Emblema que contiene el cántico Hare Krishna Rama

Etimológicamente el canto significa:
Krishna: Nombre de la literatura védica para referirse al Absoluto. En la literatura védica se dice que una persona es atractiva si tiene 6 cualidades esenciales: Conocimiento, Belleza, Fuerza, Riqueza, Fama y Renunciación. Dios es quien tiene todas estas cualidades.
Rama: Significa aquel lugar en el que están todos los placeres que existen. Ese lugar es Dios, y Rama es otro nombre por el que se le denomina.
Hare: Es la energía del Supremo. Representa lo espiritual, lo divino.

Su traducción, dicen los devotos significaría: “Tú que eres todo atractivo, que tienes todos los placeres en ti, que eres divino. Permíteme estar a tu servicio”.

Janardan, de origen cubano, nos cuenta cómo le llegó la filosofía Hare Krishna, convirtiéndose en uno de sus fundadores en Cuba, para después partir a Madrid, donde ahora preside el movimiento del barrio de Malasaña.

Para los Hare Krisna el estado de conciencia de cada individuo cuando realiza una actividad es lo que determina muchos de sus actos, y es por eso por lo que sus proyectos relacionan la ayuda social con el ser espiritual. Uno de los programas más destacados que se realizan en el Templo es “Food For Life”, en el que de lunes a viernes reparten de manera gratuita 40 platos de comida en la Plaza del 2 de Mayo, en Malasaña, para todas aquellas personas que lo necesiten.

Cartel del programa de repartición de comida “Food for Life”

La financiación del Templo, por otra parte, también está relacionada con este concepto. Los ingresos que recibe el centro     provienen de las personas que van a comer al comedor y contribuyen pagando su menú y de las donaciones, tanto de fieles como de personas de la calle o incluso entidades.

Según la concepción de la filosofía védica esto supone una ayuda económica y alimenticia, pero también espiritual, ya que para ellos todo es ofrecido a Dios.

Jaramara, se considera un devoto más del Templo, aunque su compañero Janardan nos confiesa que casi siempre lo podemos encontrar en sus cuatro paredes, pues se pasa las horas colaborando con las tareas. Con una sonrisa, nos cuenta su experiencia y cómo se lleva a cabo la repartición de la comida a los más desfavorecidos.

Vaisnavismo tradicional VS sociedad actual

Los Hare Krishna, como se ha podido ver, son una sociedad que basan su día a día, y sus creencias, en libros sagrados escritos hace cientos de años y en una cultura tradicional. Por este motivo, principalmente, es por lo que se podría decir que no terminan de encajar en una sociedad como la actual, en la que predomina la libertad y el “materialismo”.Hemos querido preguntarles por tres cuestiones que a lo largo de la historia, casi toda religión ha silenciado o se ha posicionado en su contra: la homosexualidad, la mujer, y la compatibilidad y respeto hacia las otras creencias.

Para el Visnuismo, el principio más elevado es el de la Austeridad, que implica que el sexo sólo está vinculado a la procreación y, por consiguiente, a la educación de los hijos de una manera consciente en los cuatro pilares fundamentales. Esto, supone que el placer sexual queda fuera de esta cultura, por lo que la homosexualidad no tiene cabida entre los Hare Krishna.

Teniendo en cuenta este halo de tradición y contexto socio-cultural en el que surge el movimiento, la mujer, dentro de la religión, tiene un papel muy discutible entre los fieles hoy día. En teoría, según las escrituras sagradas, todas las personas se consideran igual de aptas para relacionarse con el Supremo, tienen las mismas oportunidades, y no hay diferencia en los servicios a Dios entre hombres y mujeres. Pero en la práctica, no ocurre lo mismo en todos los Templos y lugares, según dónde nos encontremos, asegura Janardan, nos veremos en situaciones muy distintas. “Yo me considero bastante revolucionario en ese aspecto”.
Aún así, los sexos viven en lugares separados en el Templo y realizan actividades completamente diferentes. “La mujer es más participe que hace cientos de años, pero todo depende de la concepción de cada uno, de la sociedad”, comenta Janardan.

Donde parece no haber problema es en la compatibilidad de religiones, ya que se muestran abiertos a todo el mundo mientras impere el respeto mutuo. La fe en Dios es universal para esta filosofía, pues consideran que los movimientos religiosos están hechos para ayudar a las personas. “El Mantra Hare Krishna y el Padre Nuestro los puede cantar cualquiera que tenga fe en ello, y es algo que siempre le va a hacer bien a uno”.

“Eso sí, todos conocen la Fiesta del Amor”

La fiesta del amor, nos explica Janardan, se ha convertido en un ritual de celebración, tanto para los fieles como para la gente de a pie, que cada domingo se reúne para cantar. Normalmente, acuden alrededor de 40 o 50 personas a escuchar las charlas que se dan tras el canto y a disfrutar de un almuerzo vegetariano en el comedor del templo. Es una celebración en la que participan todo tipo de personas.