Las plataformas online: idea ilegal, negocio legal

El espacio multimedia del cine ya fue atraído a nuestros hogares gracias a la televisión, pero actualmente estamos en la era de las multipantallas. En España, hace ya veinte años que se miden las audiencias en televisión. Dos décadas en las que los sistemas de medición son los que mejor se han ido adaptando a los cambios constantes que se han ido produciendo como las plataformas online y la programación selectiva, el eje de este reportaje; y avances que todavía quedan por producirse en el futuro.

Contenido multimedia

La medición de audiencias en lo que pretende es conocer el número de personas que consumen un determinado producto y algunos detalles más personales. Muchas veces se habla de cantidades, pero cada vez son más importantes las informaciones cualitativas, es decir, las que consisten en saber qué tipo de personas y con qué características sigue eeligiendo un producto audiovisual u otro. Factores como qué edad tienen, dónde viven, el nivel económico, o incluso la formación cultural son factores importantes a la hora de medir las audiencias.

En televisión se utilizan especialmente tres técnicas para medir las audiencias:

1) El sondeo que funciona seleccionando un determinado número de personas que se conocen como “muestra” y preguntarles sobre su consumo de los programas emitidos por televisión. Estos pueden ser muy estimativos e incluso erróneos ya que no sabes si te mienten o no.
2) El panel, donde los integrantes de una muestra anotan cada día su consumo de televisión. También es bastante inexacto.
3) El audímetro. Se conecta a la televisión y mide automáticamente la audiencia de forma permanente. Mucho más eficaz.
Las principales fuentes de medición de audiencias en España actualmente se realizan el grupo Kantar Media (antes Sofres) y el Estudio General de Medios (EGM). Pero ya llegamos al quid de la cuestión: ¿Quién mide las audiencias por Internet? Desde hace algunos años las televisiones privadas se están viendo obligadas a cuantificar las visiones en sus plataformas y aplicaciones para saber si un programa ha gustado o no, pero las mediciones son muy inexactas. Y en la actualidad, tanto plataformas online de pago como gratuitas se están haciendo cada vez más importantes en comparación con la televisión, que cada vez tiene menos audiencia y por tanto, menos información de lo que consume realmente la gente. Uno de los primeros en utilizar este tipo de mediciones online es la Fox, que han  cambiado la forma de analizar sus cifras de visionado -> más información aquí.

Podemos encontrar todos estos contenidos online con un solo click

De entrada, se acabó lo del televisor único en el salón principal: lo que hay ahora en cada casa son muchas pantallas, en todas las habitaciones, incluso en el baño, y no todas de televisión. Si antes nuestra televisión fija estaba atada a un cable de electricidad y a una antena; ahora los teléfonos móviles sin hilos, ordenadores portátiles y tabletas nos dan una libertad absoluta. Nos sirven imágenes cuando queremos, en cualquier lugar: en el tren, en un avión, en la sala de espera del dentista, en el desierto del Sahara.

Desde hace unas décadas con las nuevas tecnologías y el acceso a internet, han surgido multitud de plataformas gratuitas donde poder consumir películas, series y animación sin límite. Páginas como seriesly, seriespepito, seriesbang, son algunos de los muchos sites en los que podemos encontrar todos estos contenidos con un solo click. Hemos podido contactar con una de estas plataformas y nos han verificado que efectivamente este tipo de plataformas son muy viables ya que según sus datos han subido respecto al año pasado un 5% sus reproducciones dentro de la página web.

En otros sites también tienes la opción de las descargas directas de archivos como los llamados torrent con la ayuda de programas como utorrent, o Ares entre otros, con el fin de poder consumirlos sin necesidad de Internet.

Dos reformas: ‘Ley Sinde’ y el conocido como ‘canon AEDE’

Todo este tinglado montado a costa de los contenidos multimedia y estas páginas gratuitas ha causado mucho revuelo y ha hecho que se regulen este tipo de accesos, otorgándoles la etiqueta de ilegales en muchos países del mundo; y en concreto en España por la nueva Ley de la Reforma de la Propiedad Intelectual.

Una reforma la cual afectaría a los usuario de Red en España. Hay dos aspectos de esta reforma: la llamada ‘Ley Sinde’ y el conocido como ‘canon AEDE’. En cuanto a la primera buscaba crear un arma administrativa para ‘restablecer la legalidad’ en los casos de una violación de derechos de autor en la Red, de una forma ágil y rápida. En cuanto a la segunda, la limitación de la actividad de reseña ha cubierto titulares gracias a esta reforma, sobre todo por la creación de una compensación irrenunciable o un canon a favor de los autores de contenidos con “finalidad informativa” y a pagar por los agregadores de contenidos, es decir, por las plataformas gratuitas.

El consumo de las plataformas online es más personalizado, más eficaz y con más calidad

Actualmente las empresas multimedia han apostado por la explotación de plataformas de pago como Netflix, Nubeox y Yomvi entre otras, que difunden una gran variedad de películas, series y animación por sus propios canales con contenido ilimitado, dinámico y actualizado con la cartelera. La causa de esto ha sido el gran potencial que tiene este mercado online en comparación con la televisión, que está sujeta a una programación determinada. Ahora lo que se lleva es consumir lo que quieras en el momento que quieras, sin estar pendiente de horarios ni de si estás en casa o no. El consumo es mucho más personalizado y a la hora de medir la audiencia, se podrá hacer de una manera mucho más eficaz y con más calidad, ya que los consumidores cada vez son más exigentes.

Este tipo de consumo multimedia es parecido al antiguo videoclub

En el caso de Netflix tiene una gran variedad de pestañas divididas según el interés de consumidor, películas de acción, ficción, estrenos e incluso bastante contenido infantil, con gran variedad para los más pequeños de la casa. Este tipo de contenidos se pueden adquirir a partir de una cuota mensual con tarifa plana o bien alquilando a tu gusto. Este tipo de consumo multimedia es parecido al antiguo videoclub, es una alternativa muy buena si no quieres pagar una cuota fija por ver contenidos. Aún así, si comparamos los precios son mucho más competitivos los de cuota fija, ya que puedes ver contenido ilimitado por muy poco.

Fuentes del departamento de comunicación de Netflix nos informaron vía e-mail que su expansión por todo el mundo no va a parar, ya que cada vez va a ser más fácil poder comercializar sus productos a través de Internet. Ya se encuentra en más de 50 países, y el aumento del consumo en su plataforma ha subido un 23% respecto al año pasado 2014.

Encuesta sobre la evolución de las plataformas online

Nosotras quisimos saber cómo se han introducido estas nuevas plataformas de pago a la sociedad y si han reemplazado realmente la forma de consumir contenido multimedia, por lo que realizamos una encuesta sobre la evolución de dichas plataformas online.

En la encuesta realizada, los datos más característicos fueron la diferencia de edad para la consumición de plataformas online, superando la edad entre los 15 a 25 años con un 48% frente a la más baja que son más de 55 años con un 6%.

*Gráfico de datos de nuestra encuesta

El consumo de contenido online supera con agravante el SI al NO por más de un 85%. Por otro lado, las plataformas gratuitas superan aún más a las de pago, con un 87%.

Las plataformas Netflix y Yomvi encabezan la lista de las plataformas de pago más utilizadas para ver películas, seguidas de las series, un nuevo formato que aumenta en cuanto a variedad se refiere. Pero igualmente, la preferencia por utilizar la televisión para el contenido multimedia ha ganado por un pequeño porcentaje en nuestra encuesta.

Aún así, quisimos salir a la calle para corroborar estos datos:

“Las series no son un fenómeno temporal”

En cuanto a las plataformas online de pago, son plataformas en las cuales la gente quiere ver vídeos bajo demanda y elegir cada momento lo que quiere ver.

Gracias a estas plataformas, las televisiones van a hacerse cada vez más grandes y más baratas, y posiblemente la programación lineal se acabe en unos años; y hasta la televisión se convierta en un negocio online. Según Reed Hastings, fundador de Netflix, “Las series no son un fenómeno temporal”. Pasará lo mismo que la evolución de la radio años atrás, cuando dieron el salto al mundo online. Los canales televisivos definitivamente tendrán que reinventarse y convertirse en plataformas online. El cine continuará existiendo, pero esta vez el cliente debe de elegir si verla en casa o en el cine, o incluso ya en el propio aparato móvil.

En definitiva, el futuro viene de la mano de un consumo de contenidos multimedia online, que proporcionará entretenimiento y estará en el hogar de muchas personas. La televisión del futuro será personalizada, con un algoritmo que sabrá toda la programación que te gusta y te recomendará de forma personalizada.