El auge de la comida rápida en España
Muchas personas, si les preguntamos qué es la comida rápida puede que no sepan ni cómo responder. Es un concepto que parece más claro de lo que realmente es, y dado el gran auge que está teniendo este tipo de establecimientos low cost, deberíamos tenerlo en cuenta. Desde Variación XXI queremos ir un poco más allà y buscar las causas de este fénomeno social y cómo ha ido evolucionando en nuestra sociedad.
Si buscamos la definición de comida rápida en varias páginas nos encontramos esto:
“Está la llamada comida rápida que es aquella que, como su propio nombre indica, se elabora de un modo inmediato y que además se consume igualmente rápido […] La comida rápida se refiere a un establecimiento donde primero se paga el consumo antes de que se sirva y donde no suele haber camareros. Sin embargo, las modalidades de servicio y el tipo de alimento se pueden dividir en varias categorías: Para llevar, en el mismo restaurante o a domicilio.”
www.definicion.es
En cuanto al nivel de calidad nadie se pone de acuerdo. ¿Toda la comida rápida no es sana ni de primer orden? Está forma de comer ha ido surgiendo poco a poco hasta la actualidad. Viene directamente de Estados Unidos -por eso muchas veces la llamamos fast food- y está muy presente en nuestra dieta diaria, hecho que ha provocado diferencias en nuestra alimentación de antaño.
Foto: Rocío Torrejón
Hamburguesas, hot-dogs, batidos, patatas fritas, aros de cebolla fritos, pollo frito, pizzas y demás snacks forman parte de la alimentación diaria de una inmensa mayoría de personas, que sin darse cuenta están llevando a cabo una dieta poco variada y desequilibrada, con muchas desventajas y peligros para la salud y el bienestar en general.
¿Por qué se establece en españa la comida rápida?
–Mundo urbano
En los años 50 y 60 del pasado siglo, la sociedad española cambió completamente su forma de producción y consumo, haciendo que mucha gente emigrara a las grandes ciudades. En los próximos años, al acabar el franquismo, el poder adquisitivo subió considerablemente y nació para quedarse la sociedad consumista. La familia cambió: las dos figuras parentales trabajan, y junto con las tareas domésticas; el tiempo se echa encima. Aquí es donde entran en juego la comida rápida y la comida precocinada.
–Cambio de estilo de vida
Los cambios en los hábitos de alimentación de la población, provocados por un ritmo de vida muy acelerado y estresante, han hecho que muchas personas se vean obligadas a alimentarse a partir de comida precocinada o directamente frecuentando las franquicias de comida rápida hasta llegar a casos en los que uno ni desciende del automóvil para ingerirla. Muchas son las empresas que han llevado esta comida al mercado, que son famosas por la rapidez con la que se elaboran. Además tienen una gran capacidad de saciar el estómago y parecer que lo que ingieres es suficiente y adecuado para una dieta equilibrada. Pero muchas veces no es así.
Restalia, una empresa que marcó el punto de inflexión en la comida rápida
Restalia es un grupo de restauración multinacional español fundado en 2004, que utiliza desde sus inicios los conceptos y el formato de cadenas de franquicias tematizadas. Actualmente, sus empresas son Cervecería 100 Montaditos, La Sureña, y The Good Burguer (TGB). En estos momentos, Restalia tiene más de 500 restaurantes operativos tanto en España como en diferentes países: Portugal, Italia o Latinoamérica. Un éxito sin precedentes con unas características específicas.
En el 2008, nace una la verdadera revolución en el mundo de los restaurantes de la comida rápida. En 2008 nace la ‘Euromanía’. ¿Qué es exactamente? Son diferentes ofertas para celebrar los diferentes días de la semana. Pueden ofrecer los lunes bebida y comida por solo 1€, si hablamos del caso del 100 Montaditos; y el miércoles encontrar los aperitivos a mitad de precio. Una idea pensada básicamente para los jóvenes de entre 18 y 30 años que quieren tomar algo con amigos cualquier día de la semana y no quiere que su economía se vea muy perjudicada. Eso sí, sacrificando la calidad por la comida rápida, sobre todo en los días en los que las ofertas son más económicas.
En 2011 nace La Sureña, conocida por sus famosos “cubos” de cerveza, que han tenido tanto éxito que incluso algunos restaurantes los han añadido a sus cartas. Al año siguiente (2012) nació TGB (The Good Burger), que esperan conseguir la misma aceptación que las demás marcas. Se presentan como un sustituto directo de al fast food de McDonald’s, con un toque ecológico y Mediterráneo que puede gustar mucho.
Pero el target de estos establecimientos no es sólo la gente joven. Muchas son las familias que frecuentan este tipo de restaurantes con el fin de picar o tomar algo sin necesidad de tener que hacerle un gran agujero a su economía. Además, estos restaurantes han supuesto para nuestro país unos ingresos extra que provienen del turismo. Ya nos parece hasta normal encontrar una gran cantidad de turistas en algunos de estos restaurantes consumiendo productos típicos de nuestro país a un precio mucho más económico de lo que estaban acostumbrados.
El concepto de los restaurantes temáticos low cost sigue siendo un éxito.
Restalia tiene en mente lanzar una cuarta marca bajo el nombre de Distrito Federale Mexitalian Food. Un novedoso concepto que reúne la comida italiana y la mexicana bajo un mismo local. Por tanto, vemos que la dirección que toman las compañías de comida rápida es la de ofrecer comida de variedad internacional y convertirlas en un producto que puede comer todo el mundo, en cualquier lugar y a un bajo precio.
Y no podemos olvidarnos del Grupo VIPS, que cuenta con varias franquicias de comida rápida en España muy conocidas, y que sigue en expansión actualmente con: VIPS, T.G.I. Friday’s o The Wok.
- Grupo VIPS Foto: Gisela Ramos
Hay una delgada línea entre la comida rápida y la que no lo es. ¿Cómo diferenciarla?
Cada vez más, la diferencia entre la comida de calidad y la que no lo es se ha ido disipando lentamente hasta el punto de no saber si realmente es bueno lo que estamos comiendo. Esto es a causa de la bajada de precios, que ha hecho que nos importe más el bolsillo que nuestra salud. Muchos restaurantes típicos como mesones, taperías, o los tradicionales menús del día; se han visto afectados y han tenido que bajar los precios como sea, con el fin de que sus negocios no se vean afectados por los establecimientos low cost.
España es un país que presume de una extensa variedad de productos mediterráneos y por ser uno de los países con mejor gastronomía del mundo. “Estos restaurantes nos han hecho mucho daño, y ha hecho que se cambie el formato”, nos decía el encargado del Mesón del Jamón en la capital Madrileña; que ya se han puesto las pilas e intentan ofertar platos rápidos pero sin dejar de lado la calidad, con el fin de atraer a los turistas.
Aún así, eso no nos salva de la revolución que han creado este tipo franquicias y establecimientos, que han cambiado completamente la forma que tenemos de alimentarnos. Hemos olvidado las grandes ventajas de la comida casera, preparada por tus padres o abuelos, en la que los productos eran siempre de buena calidad y bien cocinados; sin colorantes ni conservantes. Las nuevas generaciones apuestan por cocinar menos y tener más tiempo para uno mismo. En la alimentación de la actualidad todo vale mientras este bueno y apetitoso.
Encuesta sobre el consumo de la comida rápida
Desde VariaciónXXI realizamos una encuesta sobre la comida rápida y la comida más tradicional, con el fin de averiguar si ha aumentado o no el consumo de comida chatarra en la sociedad. Los datos más caracteristicos son la diferencia de edad en la consumición de comida rápida. El porcentaje más alto fue la franja de edad entre los 15 a 25 años con un 63%, frente a la más baja; que son las personas de mas de 55 años con solo un 4%. Aquí puede influir mucho el nivel adquisitivo de cada individuo y franja de edad.
Si hablamos de la frecuencia a la que vamos a establecimientos de comida rápida, encontramos un empate entre las personas que van entre 1 a 3 veces a la semana (31%), a las personas que van muy ocasionalmente, con un 33%. Eso sí, los establecimientos más populares en nuestra encuesta siguen siendo McDonald’s y Burger King, con un 65%.
Finalmente, también quisimos saber con qué frecuencia los encuestados visitaban establecimientos en los que no se sirve comida rápida, y vemos que la opción de entre 1 a 5 veces al mes es la más votada con el 44%, y dejan la opción de entre 3 a 5 veces a la semana con solo un 2%.
Los nietos comen peor que sus abuelos.
La conclusión más notoria que podemos sacar de la encuesta es muy parecida a la Encuesta Nacional de Salud de España (ENSE). Según estos datos la obesidad ha aumentado un 10% en la sociedad española en los últimos 25 años. Este aumento se ha visto sobre todo en los niños, ya que los adultos intentan cuidarse un poco más para evitar problemas cardiovasculares crónicos y otras enfermedades.
Pero no todo es negativo en España. El negocio de la comida rápida podría ser mucho peor. Encontramos un estudio de la EAE Business School “El gasto en comida rápida 2014” que muestra que la población en España no es de las que más dinero destinan a este tipo comida rápida. Es más, somos uno de los países que menos gasta con un total de 1.862 millones de euros en 2013; con una media de 40,08€ al año por persona en comida rápida, ¿Increíble? Estados Unidos encabeza esta lista con 63.799 millones de euros, seguido de China (34.313 millones) y Japón con 27.994 millones de euros. Este mismo estudio reveló que sí ha habido un crecimiento en el consumo de un 7% desde 2007 en nuestro país.
Los datos demuestran que factores como el crecimiento económico en países emergentes ha tenido mucho que ver en el aumento de gasto en este tipo de comida basura. Sin embargo, las previsiones para España para este año 2016 en el gasto de comida rápida son bastante altas, ya que según este estudio, se estima que alcanzaremos los 1.930 millones de euros, unos 68 millones más que en 2013.
Estoy totalmente de acuerdo con el articulo , me ha parecido muy esclarecedor.
Pues totalmente de acuerdo, la verdad que no es muy saludable pero hay veces que uno no tiene ganas de cocinar y claro recurre a ello.
Muy interesante. Por suerte, todavía no podemos compararnos con Estados Unidos, que son los que realmente tienen un problema con la alimentación y el fast food.
Articulo que aclara perfectamente lo que se llama fast food. Es lo que tiene el no tener tiempo apenas las personas que trabajan y la gran parte de la poblacion que esta en paro, que no se puede permitir el pagarse algo tan basico que es el comer bien.
Esta muy bien el reportaje. La verdad es que no te das cuenta del poder que tienen estas franquicias de comida rápida. Yo suele frecuentar este tipo de sitios como el 100 montaditos o La Sureña, y sinceramente si no hicieran tantas ofertas ni estuvieran los precios tan bajos no iría tan a menudo.
La comida rápida debería ser un remordimiento para quien la consume con mucha frecuencia, pero la comida tradicional al igual que este articulo, tan bien explicado, me ha dejado muy buen sabor de boca!
Es una pena que con la variedad de alimentos sanos y naturales q tenemos en España, acabemos comiendo esta comida basura.
Articulo que denomina perfectamente el llamado fast food. Cada vez esta mas en auge por el poco tiempo que tiene la gente que trabaja y por el poco dinero que tiene la gente desempleada y no puede permitirse algo tan basico como una comida digna.
Interesante!! Estoy de acuerdo con que en España el consumo de comida rápida va en aumento. Cada vez encontramos menús mas baratos!!
Estoy de acuerdo con lo mala que es esta comida, ahora los cumpleaños de los niños se celebran en estos sitios y yo como que lo llevo fatal cada vez que invitan a mi hija
Esta muy bien relatado este artículo y muy completo. Pienso que ir de vez en cuando a este tipo de establecimientos no hace daño si seguimos teniendo como norma general el cuidado de nuestra dieta mediterránea. Yo que tengo hijos me viene bien ir a los restaurantes de comida rápida porque estan muy orientados a ellos, ya que tienen entretenimientos infantiles para después de comer y menús divertidos con regalos para los más pequeños.
Conforme va pasando el tiempo, se nota mucho la diferencia de precio entre estos “restaurantes” y uno de calidad donde realmente se venda comida saludable, y el público joven somos la principal víctima.
Me llama la atención, que en dichas cadenas de comida rápida, las propias ensaladas u opciones saludables son bastante caras en relación al resto de productos, parece que te invitan a consumir la comida menos saludable, haciéndola más atractiva económicamente a los consumidores, en su mayoría jóvenes, que no tienen tanto presuesto para gastar. En los conocidos “menús ahorro” (que no sobrepasan los 5€) no encontramos ensaladas ni opciones saludables. Además, está comprobado que la comida de estos restaurantes llega a ser adictiva si es consumida con mucha frecuencia, debido a las grasas malas que utilizan.
Los jóvenes deberíamos ser conscientes de todo esto y de el gran negocio que esconden detrás estas grandes empresas, cuyo propósito no es ayudar a mantener una población saludable.
Gracias Elena por tu aportación. Si que es verdad que los productos más saludables como las ensaladas suelen ser más caros, y debería ser todo lo contrario para promover el consumo de verduras y otros productos para una dieta más variada.
Gracias por comentar!
Muy buen articulo y muy interesante. Normalmente frecuento estos establecimientos porque por cuestiones de trabajo necesito comer rapido. Pero despues de leer este magnifico articulo intentare evitar ir a estos locales de comida rapida. Muchas Gracias
No por ser rápida deja de ser sana, no todo son hamburguesas grasienta.. Además de venir bien especificado que contiene y sus valores energéticos… Para muchos, con trabajos y horarios trambolicos, este tipo de servicio es algo que nos salva la vida.
Al leer el articulo, me doy cuenta de como ha ido creciendo y cambiando nuestra sociedad… No solo por el poder adquisitivo que ha ido aumentando, también las costumbres, sino por el afán de “parecernos” a los grandes países. Hay que resaltar ese toque llamativo de comer comida americana: hamburguesas, hot dogs… Quizás estamos en busca de ese gran sueño americano.
Tampoco hay que olvidarse que el estilo de vida ha cambiado, donde ya nos falta el tiempo incluso para comer. Tendremos que recapacitar sobre nuestro consumo en este tipo de restaurantes y seguir manteniendo abierto esos restaurantes de comida tradicional.
Estoy de acuerdo con el artículo, lo que pasa que las personas de una economía baja como la de un estudiante, cuando sale a comer fuera tiende a lo más barato, en este caso Burguer o Macdonals.
Estoy completamente de acuerdo con el comentario que ha puesto una chica, Elena G. Los jovenes somos la principal victima de esta comida ya que al poner los precios tan baratos recurrimos a ella rapidamente sin dar valor a cosas mucho mas importantes como son nuestra salud. Creo que todos los jovenes nos deberiamls concienciar de esto ya que por 10-12 euros hay muchos sitios en los que se come muy bien, comida con calidad y lo q es mas importante, saludable.
OS doy totalmente la razón. La comida rápida y barata puede salir, a largo plazo, muy cara en cuanto al tema de salud. Pienso que habría que concienciar e informar detalladamente,atodas las personas,desde los mas pequeños a los mas mayores, sobre el consumo de estos productos.
Estoy completamente de acuerdo con este reportaje. Debemos reflexionar sobre los hábitos alimenticios en la actualidad. Cada vez mas personas basan su alimentación en un extremo, ya sea con las fast food o con la comida sana, un grave error.
Estoy completamente de acuerdo con este reportaje. Debemos reflexionar sobre los hábitos alimenticios en la actualidad. Cada vez mas personas basan su alimentación en un extremo, ya sea con las fast food o con la comida sana, un grave error.