Fuga de atletas: el deporte español en Estados Unidos

Ilustración que representa la fuga de cerebros / Fuente: LaCerca.com

• Las universidades españolas no facilitan compaginar los estudios con el deporte de alto rendimiento

• Muchos atletas optan por becas deportivas en Estados Unidos como hizo el golfista vasco Jon Rahm

En los últimos años, se ha incrementado el número de deportistas que van a cursar sus estudios universitarios en Estados Unidos porque España ofrece muy pocas becas deportivas y no solo eso, tampoco facilita la compaginación del deportista de alto rendimiento con sus estudios académicos. ¿Qué hacen? Dirigen su mirada a Estados Unidos. Según el 2022 Academic Ranking of World Universities, 39 universidades estadounidenses se colocan entre las 100 mejores del listado: convirtiéndose en uno de los sistemas educativos más prestigiosos del mundo, en el cual el deporte tiene un gran peso. Es el segundo país con mayor número de instituciones de educación superior, después de la India. El país americano suma 4.599 centros entre universidades, institutos, academias y community college. En esta extensa red educativa las oportunidades se multiplican.  

Becas deportivas en Estados Unidos

Lo primero que uno debe conocer para comprender cómo funcionan las becas deportivas en USA, es el sistema económico, educativo y deportivo del país. Los EE.UU. tienen un sistema económico muy capitalista y de propiedad privada que afecta a todos los sectores. En el ámbito universitario, realizar un grado en una universidad estadounidense  cuesta una media de 30.000 euros al año, según cifras de Education Data Initiative. Además, al ser un país tan grande, el deporte profesional no abarca todas las ciudades y regiones del país, y es por esto que en muchos lugares, el deporte universitario es el deporte principal, por lo que mueve mucho dinero.

Mascota de los Sun Devils, equipo de la Arizona State University / Fuente: Sports Ilustrated

Coste desorbitado

El gran coste de la universidad trae dos consecuencias muy generales, una buena y otra mala: 1- La buena, el gran precio consigue una gran recaudación para poder seguir mejorando la universidad en todos sus ámbitos. 2- La mala, es la imposibilidad de ciertos grupos de personas que no optan a un grado universitario por su situación económica.

 A raíz de estas dos grandes consecuencias y la creciente importancia de los deportes como imagen y prestigio, empezaron a ofrecer becas deportivas parciales y completas (ningún gasto), Dando oportunidades a jóvenes deportistas de atender la universidad, mientras que la universidad mejora el equipo. Por desgracia, las becas deportivas son uno de los ascensores sociales más comunes para los afroamericanos.

Cómo funciona la liga universitaria

Hay diferentes divisiones dentro de la liga universitaria: NCAA div. 1, NCAA div. 2, NAIA y NJCAA. La primera división tiene un nivel muy alto y muy pocos atletas optan a una beca en alguna de sus universidades, pero la división 2  y la NAIA son más accesibles. La NJCAA no es tan recomendable porque es un nivel menor en lo que se refiere a estudios, no convalida a una carrera universitaria española por ejemplo. 

Además, dan mucha importancia a ser un student-athlete Estudiante-atleta, porque la NCAA no permite competir a atletas con calificaciones que no superan el mínimo exigido. Aun así, al juntar deporte y estudios, deben ir en la misma dirección, y tanto los entrenadores, como los profesores, intentan ayudar lo máximo posible al permitir cambios de clases o fechas de entrega.

Michigan Stadium (Ann Arbor) con 115 000 asistentes, récord de la NCAA / Fuente: michiganreview.com

Requisitos para obtener una beca

Las universidades y la NCAA piden ciertos exámenes. El primero es el SAT,  la selectividad estadounidense y la segunda, el TOEFL, un examen de inglés.  Es importante saber que no sirven los títulos de inglés de Cambridge. El SAT tiene tres apartados:Análisis de lectura, Matemáticas y Escritura, y el examen dura 3:45 horas aproximadamente. Es un examen que puede asustar de primeras, pero es asequible si se trabaja adecuadamente porque es un examen tipo test. El TOEFL por su parte, sí que puede ser más complicado, porque es un denso examen estandarizado del dominio del inglés de tres horas y media. Estos exámenes no se aprueban o suspenden, se consigue una calificación que cuanto mejor, más opciones de conseguir una beca.

En lo que respecta al deporte, cada especialidad tiene su modo de funcionar. En deportes individuales como la natación o atletismo, suele ser más fácil seleccionar para las universidades que los deportes de equipo porque hay marcas 100% objetivas, solo deben mirar las marcas de la especialidad del jóven que ojean para la beca para saber su nivel. En deportes de equipo como fútbol o baloncesto, se mandan vídeos de highlights y los ojeadores tienen más trabajo, por eso puede tener más incertidumbre. Aun así, en los últimos años, diferentes entidades como AMG, han realizado eventos para que universidades de Estados Unidos vengan a ojear a jugadores españoles. 

La situación de las becas en España

España cuenta con diversos programas de becas pero, a diferencia del modelo estadounidense, los programas españoles están dirigidos a ser un complemento o ayuda en los estudios y no tanto a financiar la totalidad de estos, así como los gastos de alojamiento y alimentación.
Podemos encontrar programas de becas públicos como los financiados por el Ministerio de Cultura y Deporte por medio del Consejo Superior de Deportes, así como los financiados por las diferentes CCAA. Estos programas están destinados a deportistas de alto rendimiento que recibirán una ayuda de 1400€ mensuales, además, por medio de las becas del Ministerio de Educación y Formación Profesional y del Ministerio de Universidades, se puede optar a la financiación completa de los estudios si la situación económica del deportista se adecúa a los niveles de renta exigidos.

También encontramos una gran variedad de programas privados, desde los impulsados por las propias universidades privadas hasta programas de instituciones o asociaciones deportivas o programas impulsados por empresas como Santander o Telefónica.
Los programas universitarios más conocidos pertenecen a la Universidad de Navarra y a la Universidad Camilo José Cela y están destinados a financiar parcialmente la formación del deportista con una cantidad que varía entre el 5% y el 50% de los gastos de matrícula en función de la categoría federativa del deportista. Ambos programas exigen figurar en el BOE o en el CDS como periodista de alto nivel o rendimiento y cumplir con unas exigencias de rendimiento tanto académico como deportivo, además, el becado deberá representar a la universidad en las competiciones. En concreto, la Universidad de Navarra ofrece una convalidación de hasta 6 ECTS optativos por buen rendimiento académico-deportivo.
Estos programas suelen proveer al becado de servicio médico y un programa de nutrición y entrenamiento personalizado

128 participan en el Programa Talento Deportivo de la Universidad de Navarra

En conclusión, los programas de becas deportivas españoles están destinados a ser un complemento o ayuda en la financiación de los estudios y no una financiación completa de estos. Además, a diferencia de los programas estadounidenses, el deportista debe destacar y haber conseguido federarse con logros para obtener un programa de beca, es decir, no se busca potenciar a futuros deportistas de élite sino que se beca a los ya existentes, excluyendo así a las personas que por su situación personal no han podido invertir tiempo en su profesionalización deportiva e imposibilitando así que el deporte sea un ascensor social en nuestro país.
Es cierto que en España los costes de matrícula son notablemente menores que los de EEUU y que existe un programa público de becas que financia la totalidad de los estudios a personas con rentas medias o bajas, pero estos programas no aseguran ni promocionan la conciliación del deporte y la vida académica. Estamos por tanto lejos de esa visión estadounidense del deporte como ascensor social y oportunidad de futuro.

Entrevista a Anita Doñaque Solans

Es una estudiante de Business Administration en Florida National University en Miami, becada en Baloncesto. Nació en Zaragoza y mientras jugaba en el equipo Mann Filter se le ofreció la idea de estudiar en Chicago becada por baloncesto. Tras 2 años en Chicago se traslada también becada a Miami.

Los intermediarios

En España hay numerosas empresas que se dedican a asesorar a aquellos interesados en estudiar en Estados Unidos, sean el bachiller o la universidad, con beca o sin ella, aunque preferiblemente se busca la beca ya que los estudios en el país americano son mucho más costosos que España. No son obligatorias para estudiar en Estados Unidos pero sí recomendables porque son las que conocen el sistema estadounidense al detalle y echan una mano con la extensa burocracia. Las agencias evalúan caso a caso  para ofrecer las opciones que mejor se adapten al perfil del estudiante y ayudan en la gestión de los exámenes de acceso: el SAT, el homólogo de la EvAU y, la prueba de inglés TOEFL. En adición, realizan los trámites burocráticos y de logística del estudiante como la obtención del visado, el alojamiento o los vuelos.

 Global College USA es una agencia de asesoría académica ubicada en Asturias que ayudó a más de 300 estudiantes este año y más de 200 el año anterior. Este incremento en número muestra un aumento en el interés por cursar los estudios universitarios en Estados Unidos. Ahora bien, la educación universitaria en Estados Unidos es mucho más costosa que en España, también la pública. No obstante, se pueden conseguir una beca deportiva que cubren un alto porcentaje del coste. Global College USA asegura que los estudiantes consiguen cerca de un 80% de beca, es decir, el estudiante tiene que pagar tan solo el 20 por ciento de su matrícula universitaria. Si se aplican estos porcentajes, por ejemplo, en un grado de 25.000$ (como es el caso de Anita Doñaque):  20 000 dólares lo asumiría la universidad y el becado desembolsaría tan solo 5 000$. Lo que paga ese estudiante español en Estados Unidos es una cifra muy similar a lo que paga un estudiante por cuatro años de carrera en una universidad pública española. Hay que tener en cuenta,  que el porcentaje de la beca es proporcional al nivel académico y deportivo que el estudiante tenga, o sea, a mejores notas y resultado deportivos, mayor es la cuantía de la beca. 

 Los deportes que predominan entre los estudiantes que acuden a esta agencia son el tenis principalmente, le sigue el fútbol y el atletismo y las zonas más atractivas son los estados de Florida y California por el clima y la costa, según afirma asegura la agencia asturiana. Y al parecer, EEUU parece responder favorablemente al alumnado español porque «están súper interesados en conseguir más jugadores debido a su actitud». En España hay jóvenes buscan compatibilizar ambas esferas, la académica y la deportiva, a Estados Unidos le gusta lo que viene de España y hay numerosas agencias que facilitan el trámite: se dan los ingredientes para una fuga de talento español.   

Captura de pantalla de la
página web de Global College USA con historias de estudiantes deportistas de Global College

Caso célebre: Jon Rahm, estrella del golf

Jon Rahm cuando jugaba en los Sun Devils / Fuente: thesundevils.com

​​Una historia que puede servir de inspiración para los chavales que va a estudiar a Estados Unidos con becas deportivas es el caso de Jon Rahm. A fecha de este reportaje, es el quinto mejor jugador de golf del mundo según la clasificación mundial Official World Golf Ranking. Nació en Barrika (País Vasco) en noviembre de 1994 y tras graduarse de secundaria y bachiller en el Instituto Ortega y Gasset de Madrid sus padres le animaron a cursar sus estudios en Estados Unidos. Desde pequeño siempre ha estado ligado a los deportes, practicando diferentes disciplinas hasta que en la adolescencia decidió enfocarse exclusivamente al golf. 

En 2012, comienza sus estudios superiores en Arizona State University (ASU) con una beca de golf. En líneas generales, el acceso a este centro es exigente académicamente, pues requiere del estudiante: que se gradúe dentro del 25% de su promoción con mejores calificaciones, con un GPA mayor a 3 (mínimo un 7 sobre 10 en España) y una nota de 1120 puntos sobre 1600 en los SAT, la selectividad estadounidense.

El jugador vasco obtuvo en el 206 Bachelor of Arts Degree in Communications, esto es, un grado en ciencias de la comunicación si se hace una equivalencia al sistema español. Durante su estancia universitaria jugaba en la división masculina de golf de los Sun Devils, el equipo atlético de Arizona State University en el que conoció a Tim Mickelson, entrenador del equipo y futuro agente y hombre de confianza de Rahm. También, en estos cuatro años de universidad consiguió mantenerse durante 60 semanas número 1 en el World Amateur Golf Ranking.

De la localidad guipuzcoana de Barrika a ser de los mejores jugadores de golf en la actualidad, además de ídolo dentro de la afición golfista en España. ¿Podría haber llegado a este punto de no ser por esa beca de golf?

Jon Rahm en la competición Waste Management Phoenix Open / 2021 Scottsdale, Arizona / Fuente: GettyImages

Entrevista a Mikel Madina

Mikel Madina, es uno de los miles de ejemplos que se ven cada vez más. Mikel, nacido en él 2001, es de un pequeño pueblo guipuzcoano llamado Oñati, y decidió buscar la oportunidad de salir de su pueblo para poder compaginar estudios universitarios y fútbol. 

Hemos podido hacerle una pequeña entrevista donde habla sobre todo de las ventajas y desventajas de esta decisión.

Con este vídeo se declaro que el salto a Estados Unidos es una acción más de valor que de problemas reales. Mikel es un gran ejemplo de lo que se puede conseguir con este tipo de ayudas.

No es tan complicado obtener una beca para estudiar en USA. Uno tiene que ser consciente de su nivel y trabajar duro para conseguirla, pero hoy en día, con agencias profesionales que realizan estos trabajos, la oportunidad es mucho mayor y accesible. Lo más difícil es tener el valor de dar el salto y cruzar el charco para afrontar una experiencia única.