Banco de Alimentos de Madrid, de todos y para todos
Voluntarios en el Banco de Alimentos de Madrid. / Foto por: Banco de Alimentos de Madrid.
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Más de 10.000 voluntarios participan en la Gran Recogida de este año, con el objetivo de 21 millones de kilos de alimentos.
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La organización cuenta durante el año con 443 personas, de las cuales 410 son voluntarios y voluntarias permanentes.
Con la llegada de la Navidad, el Banco de Alimentos de Madrid afronta uno de los períodos más importantes del año. La situación económica de muchas personas ha empeorado con la inflación presente en nuestro país y la Gran Recogida de Alimentos es más necesaria que nunca. Pero la actuación del Banco de Alimentos no está solo presente en estos meses. Durante el resto del año también desempeña las funciones de recolecta y almacenamiento del sustento de muchos madrileños. Pero todo ello tiene un coste y la función benéfica de la institución hace que su mano de obra esté basada casi exclusivamente en voluntarios y voluntarias que sostienen todo el proceso. Hemos visitado las instalaciones centrales de la institución para saber cómo es el funcionamiento del proceso de recogida de donaciones y excedentes alimenticios hasta la entrega a otras organizaciones solidarias.
Qué es el Banco de Alimentos de Madrid
El Banco de Alimentos de Madrid es una organización privada y sin ánimo de lucro dedicada a la recogida de alimentos, principalmente no perecederos, cuyo fin es proporcionar material a entidades caritativas y de ayuda social para que ellas se encarguen de suministrar a las personas con necesidades.
Otras de sus dedicaciones son, el luchar contra el despilfarro de comida, recogiendo excedentes en origen y recuperando alimentos en las fases finales de comercialización. Además, realizan tareas de concienciación en las generaciones más jóvenes.
Fue fundado el 1 de septiembre de 1994 y es miembro asociado de la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL). Esta organización está formada por 54 Bancos de Alimentos de toda España.
Voluntario del Banco de Alimentos de Madrid. / Foto por: Natalia Rodicio.
El Banco de Alimentos de Madrid tiene 4 delegaciones repartidas por varios puntos de la comunidad: Alcalá de Henares, Alcorcón, Mercamadrid y en el Colegio San Fernando de Madrid, que actúa como sede central.
La entidad está formada por 443 personas, entre las que se encuentran 410 personas voluntarias permanentes, es decir, el 97% del personal trabaja sin ánimo de lucro.
El día a día del Banco de Alimentos
El Banco obtiene los alimentos de 3 fuentes distintas: donaciones de particulares, empresas, colegios y eventos. FESBAL y FEGA-FEAD (Fondo de Ayuda Europea para las personas desfavorecidas) también canalizan alimentos o fondos para la obtención de material. Además, desde el año 2013, se promociona la Gran Recogida en la época navideña, donde son necesarios muchos más voluntarios para trabajar en una de las épocas de mayor donación. Esta etapa ocupa el 16% de las donaciones totales de todo el año. Otra forma son las recuperaciones de excedentes de la industria alimentaria, de ferias y eventos o de la misma Mercamadrid, además de desperdicios de la propia distribución.
Y por último, las compras que desde el año 2020 se pueden realizar donaciones monetarias. Con ellas, se pueden obtener productos indispensables para muchas familias como alimentos y materiales para bebés. Además, es necesario un apoyo monetario para afrontar los gastos logísticos de cada almacén y el mínimo personal contratado.
Con las diferentes recogidas durante el año, el Banco de Alimentos almacena y clasifica los alimentos en las 4 delegaciones, tarea que realiza el personal voluntario.
Almacén del Banco de Alimentos de Madrid. / Foto por: Natalia Rodicio.
Una vez clasificado, no se distribuye directamente lo recogido, sino que se suministra a entidades benéficas, quienes son las encargadas de hacer llegar los alimentos a las personas habilitadas como beneficiarios por los servicios sociales. Entre estas entidades benéficas que distribuyen los alimentos se encuentran entidades de reparto, que entregan lotes de alimentos para cocinar y consumir en casa, o entidades de consumo, como los comedores sociales elaboran la comida para consumirla en el mismo establecimiento. Algunas de las instituciones realizan ambas tareas.
El año pasado, el Banco colaboró con 566 entidades benéficas, las cuáles ayudaron a 180.236 personas, entre las que se incluían 7.440 niños y niñas en período lactante.
El papel de los voluntarios en el Banco de Alimentos de Madrid
El Banco de Alimentos de Madrid es una organización grande, por lo que, a pesar de que esté compuesta mayoritariamente por voluntarios, cuenta con todo tipo de departamentos y funciones a desempeñar.
Hay muchos voluntarios destinados al trabajo de almacén y al de clasificación de alimentos. Esta última es una que se comparte entre varios voluntarios; hay dos grupos dedicados a la clasificación de alimentos, uno que viene tres días a la semana y otro los dos restantes, que cuentan con una jornada de tres horas por la mañana.
Almacén de clasificación del Banco de Alimentos de Madrid. / Foto por: Natalia Rodicio.
Los voluntarios de clasificación son los que ayudan cuando el Banco recibe los palés de alimentos recogidos, que vienen todos mezclados. Su labor consiste en comprobar las fechas de caducidad y separar los alimentos en lotes de cantidades previamente estipuladas, de tal manera que las entidades benéficas puedan recogerlos y quede constancia en el Banco de Alimentos de la cantidad de alimentos que salen de los almacenes.
El almacén es solo uno de los muchos espacios en los que se puede desempeñar la función de voluntario, aunque es una de las más comunes. Los 410 voluntarios se dividen en puestos que recogen las áreas de: marketing, comunicación, logística, distribución y atención a las entidades benéficas. Cada uno desempeña las funciones propias de cada departamento.
Los perfiles de los voluntarios son muy diversos, pues hay algunos que deciden desempeñar la misma labor que ejercían en su carrera profesional para así aportar sus conocimientos al funcionamiento del Banco de Alimentos y, por el contrario, otros buscan un cambio de sector en el voluntariado.
El COVID en el Banco de Alimentos
La situación del COVID forzó al Banco de Alimentos de Madrid a funcionar de una manera sin precedentes, a organizarse de una manera distinta internamente y a interactuar de otra manera con las entidades benéficas con las que colaboran.
Respecto a la dinámica interna, la media de edad de los voluntarios es de 64 años, por ello, la mayoría de los voluntarios se confinaron siguiendo los criterios impuestos por el Estado de Alarma. Se apuntaron muchas personas jóvenes para suplir las bajas de los voluntarios que entraban en el perfil de personal ‘de riesgo’.
Banco de Alimentos de Madrid. / Foto por: Natalia Rodicio.
Se crearon grupos de trabajo cerrados para que los voluntarios no coincidieran con todos los figurantes en la plantilla, sino con un grupo reducido fijo. Con esta medida se evitaron bajas masivas por confinamiento y el Banco de Alimentos contaba con personal suficiente para su funcionamiento.
Las empresas tomaron un rol activo en la ayuda al Banco de Alimentos, ofreciendo recursos para su funcionamiento. “Una empresa del grupo Endesa nos prestó coches para la movilización en la pandemia, una empresa nos puso Teams en funcionamiento para poder comunicarnos entre nosotros y organizar nuestra labor, Mercamadrid fumigaba los almacenes, los bomberos entregaron menús… Las empresas nos ayudaron un montón, cada una como podía y como se les ocurrió”, aseguraba Mila Benito Tapia.
Debido a la situación de la pandemia, había más personas que necesitaban de los servicios del Banco de Alimentos; se repartían 280.000 comidas diarias aproximadamente durante el COVID, distribuidas de manera distinta a la habitual.
Datos de Memoria del 2021
Enel año 2021 se contrataron 22 personas, hubo 420 voluntarios permanentes, y contaron con un voluntariado ocasional para la Gran Recogida 2021 que consistía:
- Recogidas en tienda: contando con 5.674 voluntarios.
- Voluntariado de empresas: donde colaboraron 7 empresas y 89 de sus empleados.
En el ejercicio total del Banco de Alimentos de Madrid, según estipula la memoria anual publicada por la organización, se recibió una donación del FEAD (Fondo de Ayuda Europea para las Personas Más Desfavorecidas) de más de 5.633.000 kilos de alimentos, que se entregaron a las entidades benéficas designadas por el programa.
Para diciembre de 2021, el Banco facilitó alimentos a 562 entidades de Madrid capital y de otros municipios de la comunidad, con un total de 80 municipios atendidos . De igual manera, para este mes, la ayuda alcanzó a llegar a un total de 180.236 personas, a las cuales se le ofreció una comida diaria, y de las que 7.440 eran población lactante.
El mes que más beneficiarios tuvo del año fue agosto, con 188.492 personas, y el máximo de entidades benéficas atendidas fue de 566.
Datos recuperados de la memoria anual del BAM. Hecho por: Isabelle Jacobo.
La importancia de las Operaciones kilo
Son el medio por el que más voluntarios se recaban -la plantilla está formada sobre todo por voluntarios ocasionales- y además, es el más productivo. En 2021 se realizaron 625 Operaciones Kilo, tanto en formato online como presencial, en empresas, organismos e instituciones, centros educativos, cadenas de distribución y en la propia web del BAM. Los fondos recogidos en las Operaciones Kilo se destinan a compra de alimentos de cesta básica.
Datos recuperados de la memoria anual del BAM. Hecho por: Isabelle Jacobo.
A través de esta forma de voluntariado es como se consiguen más donantes, seguida de las empresas del sector de alimentación:
Fuente: Memoria anual del BAM.
2022, un año complicado para todos
En 2022 se ha superado la crisis sanitaria provocada por el COVID, pero la crisis económica aún persiste. Con la actual inflación vigente en España, el perfil de personas que necesitan ayuda ha cambiado. Las donaciones han caído un 40% respecto a los meses anteriores al verano. Además, se espera un aumento de la demanda de alrededor del 20%. Al perfil de personas que viven en la pobreza, se ha añadido uno nuevo: españoles de clase media, jóvenes, a veces con hijos e incluso con trabajo que no pueden afrontar la situación económica. “Sólo la cesta de la compra ha subido un 14%, más el alquiler y suministros, no llegan. Es por ello que se les ayuda con alimentos para que puedan llegar a fin de mes”, explicaba Mila Benito Tapia, directora de Marketing y Comunicación del Banco de Alimentos de Madrid.
Gran Recogida de Alimentos 2021. / Foto por: Banco de Alimentos
También se ha notado el incremento de los jóvenes monoparentales y migrantes jóvenes que necesitan ayuda. “Hemos notado que nos pide ayuda que ya no la necesitaba. Gente que necesitó ayuda durante la pandemia porque no pudo trabajar, dejó de necesitar nuestra ayuda cuando volvió a trabajar, pero ahora está de nuevo sin poder llegar a fin de mes”, añade Benito Tapia.
Desde el Banco de Alimentos mantienen su ilusión y esperan recaudar 21 millones de kilos de alimentos durante esta Gran Recogida.
Información de interés acerca de cómo hacerse voluntario o donante
Donación de alimentos. La web presenta cinco opciones de cestas con distintos precios y contenidos para mayor adaptabilidad.
Donaciones económicas. A través de Bizum, PayPal o tarjeta bancaria.
Voluntariado. Como voluntario permanente, el horario a cumplir es de jornadas matinales de 4 horas, 2 o 3 días a la semana. En el caso de los voluntarios ocasionales, existen colaboraciones en trabajos puntuales o situaciones extraordinarias, tanto entre semana como en el fin de semana, también en turnos de 4 horas.
Ayudar como empresa. Aporta ventajas ficales a las empresas donantes; pueden reducir el 80% del importe de los donativos hasta 150€, y a partir de esa cantidad, el 35% o el 40% si la empresa lleva colaborando al menos tres años seguidos.
Operaciones kilo. Hechas en empresas, centros educativos, centros comerciales, eventos solidarios… Ayudan a sensibilizar a la sociedad sobre la pobreza.
