PatataBrava: el negocio de los apuntes
La vida universitaria es una etapa muy recordada por todos, de una manera u otra la idea romántica del universitario es recordada con añoranza cuando nos lanzamos a las garras de la vida laboral. Pero no todo son fiestas y amores fugaces, los universitarios también tienen que tomar apuntes e ir a clase si quieren llegar a los exámenes lo suficientemente preparados como para no reprobar. Es aquí donde aparece el mercado de los apuntes, transacciones económicas para salvar el curso lo más dignamente posible. En un mundo donde las aplicaciones de móvil están colonizando toda la realidad, era de esperar que en el mercado universitario no se hiciera mucho de rogar.
El Rato tonto, el Rincón del Vago y Patata Brava son algunos de las plataformas que se han adueñado del zoco que puede llegar a convertirse los pasillos universitarios. Con más de 800 mil universitarios inscritos y 320 mil apuntes, la que se lleva el oro entre estas plataformas es PatataBrava. Esta plataforma fue fundada en el año 2002 por Andreu Carity, Orial Solé y David Tardá mientras eran estudiantes de Periodismo en la Universidad Autónoma de Madrid. Según los propios fundadores «fue fundada en la propia cafetería de la universidad», siendo denominada por la tapa que pedían para amenizar sus reuniones.
¿Más que un intercambio de apuntes?
Lo realmente curioso que estas plataformas no solo se dedican a conectar a universitarios de toda españa para que lleven a cabo el intercambio de apuntes, sino que se ha convertido en una red social. En Patatabrava, por ejemplo, se pueden encontrar exámenes y consejos para llevar la carrera lo mejor posible, aparte de los apuntes. Pero también se pueden encontrar Pisos y habitaciones libres, libros necesarios para aprobar las asignaturas, los distintos másteres que se pueden hacer en todas las universidades. Se podría parar aquí sino fuera por la joya de la corona, además de todo esto, en Patatabrava se puede encontrar un ranking de profesores, citas célebres de estos y consejos para saber la personalidad y la manera de impartir las clases.
No hace mucho tiempo, la reputación de los profesores se creaba a través de las charlas en los pasillos, entre clase y clase, ahora va más allá, queda guardado en una plataforma que tiene más de 76.535 seguidores en Facebook y algo más de 21 mil seguidores en Twitter.
Recientemente la plataforma ha ampliado su público objetivo introduciendo una nueva sección «Selectividad, la sección para los futuros patateros».
No es oro todo lo que reluce
Casi todos los profesores universitarios han consultado alguna vez esta plataforma, se saben de memoria algunos de los comentarios de PatataBrava y confiesan que si fueran alumnos de nuevo la consultarían para ver lo que pone. Los educadores piensan que la plataforma tiene tanto su lado positivo como su lado negativo.
La fiabilidad de la web por parte de los profesores está en duda. Tanto los apuntes, exámenes como las opiniones que se escriben sobre los profesores están poco fundamentadas decía Javier Mayoral, profesor de Redacción Periodística en cuarto curso en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense. En cambio David Álvarez, profesor de Estructura (entre otras asignaturas) de la misma facultad, afirma que la fiabilidad es muy dudable puesto que es una forma de mostrar el cabreo. «Una misma persona haga seis comentarios», llega a decir Álvarez refiriéndose a los comentarios negativos que un alumno puede introducir en PatataBrava de un mismo profesor.
Una ventaja que aporta la web para los profesores es que haya una retroalimentación de información entre profesor y alumno; y que estos últimos puedan evaluar tu trabajo. Javier Mayoral piensa que es “sano” conocer no solo cómo te percibes tú en una clase sino cómo te perciben tus alumnos.
Otra parte parte negativa de la plataforma es que, en ocasiones, se suben materiales que son auténticos disparates: «yo he visto algún material y he dicho esto no tiene nada que ver con lo que he dicho yo en clase. Me parece una deformación un poco peligrosa porque los alumnos se creen que esos apuntes se pueden comparar a la asistencia a clase», dice Javier.
Algunos comentarios de la web son demoledores para los profesores universitarios. Muchos de ellos incluso han cambiado la manera de dar clase después de haber leído opiniones en la red. Sin embargo, pocos profesores se sienten identificados con lo que se dice de ellos en la web, pero como dice Mayoral retratan en parte.
Por su parte, David Álvarez reivindica los métodos que tienen los alumnos para evaluar a los profesores de manera oficial. «La persona lo haga a través de las encuestas de docentia porque estas sí tienen repercusiones» afirma.
Opinión de los alumnos
En una encuesta elaborada a 20 alumnos universitarios se ha obtenido que el 100% de ellos han entrado alguna vez en Patatabrava. De estos, el 85% tienen cuenta en esta plataforma mientras que el 15% aún no se ha animado.
Entre los alumnos universitarios que utilizan la web, el 42’1% la utilizan solo en exámenes, el 31’6% la utilizan al principio de curso para tener referencias de los profesores y solamente el 26’3% la utilizan durante todo el curso. La mayoría de alumnos universitarios utiliza Patatabrava para orientarse a la hora de hacer su matrícula universitaria, lo dice el 85% frente al 15% restante que niega hacerlo.
Los profesores ya pusieron en duda la credibilidad de la web en las entrevistas. Por el contrario, los alumnos le dan un gran grado de fiabilidad, un 90% de ellos piensan que la página es bastante fiable.
Por un lado, el uso que le dan la mayoría de los alumnos es para consultar referencias sobre los profesores con un 85% y un 15% restante lo hace para descargar apuntes.
La mayoría de los encuestados, el 80%, confiesa que no pagaría por descargar apuntes. Por último, los alumnos confiesan que les importaría un poco lo que pusieran de ellos en la página web, el 45% frente a los 35% que dicen un sí rotundo y un 20% que piensa que no les ofendería estos comentarios.
¿Qué gana PatataBrava con esto?
Si alguien sale ganando con esto, no son los alumnos consiguiendo los apuntes de una asignatura a la que no han asistido en todo el cuatrimestre, sino que es la propia plataforma
A través de ciertos métodos, PatataBrava consigue embolsarse beneficios. La plataforma tiene cabida para publicidad, una de las grandes fuentes de financiación de la misma. Pero, además de ella, existe un arduo método por el que los usuarios pagan los servicios de la misma.
La descarga de apuntes tiene un funcionamiento a través de puntos que se consiguen mediante la subida de apuntes o al punturar los descargados de forma gratuita. Sin embargo, si no se dispone o no se desea subir apuntes o puntuar otros, la plataforma dispone de un sistema de “venta de puntos”. El usuario compra 180 puntos al precio de 5 euros (la opción mínima) o 1.800 puntos al precio de 50 euros (la opción más elevada).
No obstante, la venta de puntos es solo una rama de esta fuente de financiación económica, pues se ofrece a los usuarios otras opciones como la de pertenecer al Club PatataBrava, que mediante el pago de una cantidad mensual (dependiendo de las mensualidades que se soliciten el precio varía), el consumidor podrá hacer uso de la plataforma de manera ilimitada.
Yo creo que es el negocio redondo cobran por nada