La reventa, uno de los negocios más rentables del mercado negro

Entradas para un partido de fútbol.

• La reventa genera unos beneficios de dinero importantes al año, teniendo una rentabilidad clara.
• Los clientes de este negocio sufren estafas, entradas revendidas…

La reventa está a la orden del día. Cada año, la suma de este mercado alcanza los 12 billones de dólares en todo el mundo. Son muchos los que se lucran de forma ilegal, aprovechándose del alto interés que genera en la gente determinados eventos.

Pero no es solo reventa. Ahora también están engañando a la gente. De un tiempo a esta parte, se ha puesto de moda el falsificar las entradas. Ya no es el hecho de comprar una entrada y revenderla por un precio infinitamente superior. La nueva moda es vender esa entrada dos veces, o tres, incluso cinco.

El comprador piensa que está adquiriendo un ticket válido para asistir al evento que desea, pero lo que no sabe es que tal vez esa entrada ha sido comprada por otra persona. Es decir, hay dos entradas con la misma numeración, mismo código de barras, etc.

El primero que llegue no se enterará de nada, y pasará al recinto sin ningún tipo de obstáculo. El problema llega cuando los siguientes compradores desean acceder. Es ahí cuando a la persona que está controlado el acceso, es informada de que esa localidad ya está dentro, por lo que esa persona no podrá pasar.

La especulación de boletos es un problema y muchas empresas trabajan para erradicarla. La cabecera la ha tomado una compañía española, Tracer, que ha diseñado y puesto en marcha la primera entrada que permite el bloqueo para que no sea vendida por segunda vez.

Esta redacción ha intentado acercarse a los reventa. En un primer intento, asistimos al Wizink Center. Allí, se celebraba la final nacional de Batallas de Gallos. Por supuesto, fuimos sin entrada, pero nos fue muy sencillo encontrar gente que nos ofreciese tickets. Nos pedían un precio que oscilaba entre los 40 y los 60 euros, por una entrada en pista. Para tratar de contrastar precios, preguntamos a gente de a pie cuánto le había costado su entrada, habiéndola comprado de forma anticipada. Todos los decían que entre 15 y 20 euros, dependiendo de la zona.

Esto quiere decir que, aquellos que intentaban vendernos las entradas, estaban aumentando mínimo un 100% su precio real. Pero no nos quedamos ahí. El pasado día 3 de noviembre, asistimos al Santiago Bernabéu. Allí jugaba el Real Madrid.

Finalmente, ese reventa se echó para atrás y no quiso vendernos las entradas. En realidad lo que buscábamos quedando con él, era sacar más información acerca de este mundo.

TIPOS DE REVENTA

En persona, el medio empleado es el clásico deambulante que se pasea por los aledaños de un estadio o de un teatro vendiendo a todos aquellos desesperados que se han quedado sin entrada a precio de oro.
¿Legal o no legal? Pues en nuestro país hasta el momento solo existe una norma que regule la reventa, y es del año 1982, año que se jugaba en España el Mundial de fútbol. Esta ley se encuentra en Reglamento General de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas, en cuyo artículo 67.2 establece:
«Queda terminantemente prohibida la venta y la reventa callejera o ambulante de localidades».

Es evidente que esta norma está muy anticuada, no solo por el año de creación sino porque en ese momento ni se preveía la existencia de Internet, ni el avance y desarrollo de las nuevas tecnologías.
Por tanto, nos encontramos ante una especie de vacío legal que ha favorecido la aparición de numerosas empresas de reventa online de entradas, como: Ticketmaster, Stubhub, Viagogo, Milanuncios, Tengoentradas o Ticketbis.
Pero no hay que confundir la reventa de entradas con las plataformas de distribución directa de entradas como pueden ser Entradas.com o Ticketea.

Las webs de reventa, suelen tener un domicilio fiscal fuera de España, ante la existencia de un conflicto, las dificultades para reclamar aumentan por la lejanía o el sometimiento a tribunales de justicia extranjeros.

Alrededores de San Siro, espacio por donde los reventa se mueven en días de partido.

Pero, ¿Es legal o ilegal? Podríamos decir que es alegal, es decir, funciona sin haber sido reglamentado pero tampoco prohibido. La reventa online, que está en el punto de mira en varios países, es legal, «más o menos». Tanto, que uno de los clásicos de nuestro país es: «Vendo boli Bic a 800 euros y regalo entrada para la final de la Champions»

La reventa de entradas ha originado un fenómeno denominado «scalping». Esto es comprar cientos de entradas al instante con el único fin de revenderlas, algo que funciona sin que nadie pueda controlarlo. Podemos poner de ejemplo la visita del Papa Francisco a Nueva York en 2015. Se ofrecieron 80.000 euros. Investigamos sobre las reventas, uno de los negocios del mercado negro, donde se mueve cantidades desproporcionadas de dinero. Eventos deportivos, conciertos, espectáculos taurinos… son los lugares de interés para la acción de compraventa de entradas. Profundizaremos con datos para obtener información de como obtienen tanto beneficio en una venta de una simple entradas gratuitas para ver de cerca la visita del Papa Francisco en Central Park… Y la mayor parte acabaron vendiéndose a miles de dólares en las webs de reventa.

Estos portales de reventa operan «legalmente» como intermediarios de los que disponen la reventa. Pagan sus impuestos, declaran las ventas y se limitan a funcionar como nexo entre el revendedor y el demandante
Pero, como hemos comentado antes, en principio operamos con una ley que afirma que la reventa está prohibida. En principio. Algo que supuso el boom de este fenómeno: «vendo boli por XXX euros y regalo entrada para evento Y» se convirtió en la fórmula. Vendo postal, vendo libro, vendo llavero, vendo un par de pinzas de la ropa y, oye, de paso te regalo una entrada para el concierto de Bruce Springsteen . Astuto y tan confuso que a día de hoy parece no haber una jurisprudencia sobre el tema.

Ejemplo de reventa online.

Así han podido crecer estas páginas en Internet dedicadas exclusivamente a la reventa, sin más límite que el precio que los usuarios quieran acepta, siendo la mayoría empresas legales, sin que nadie les haya puesto ningún impedimento hasta ahora. Por ejemplo, si pagas una entrada de reventa para el concierto de Adele a 300 euros, ya que las originales hace mucho que están agotadas cuando la entrada más cara de Adele valía 115 euros pues es tu problema.

¿Y si se cancela el concierto? Las webs de reventa se cubren las espaldas ante esto. Por ejemplo, Ticketbis no realiza el cobro de la entrada revendida hasta una semana después del evento, en caso de que se haya celebrado con normalidad. Si Adele cancela, no pasa nada. Pero no porque la ley les obligue, porque ley precisamente no hay. Así que, esto es cuestión de las condiciones del propio portal de reventa.

Este vacío legal facilita, aunque sea independiente, la operación de agentes o incluso “mafias” capaces de operar con bots y otras herramientas que se saltan los límites para agotar las entradas en los

Plaza de Toros de Las Ventas, donde hay un sitio especial para la reventa de entradas.

sitios originales en pocos minutos, más que nada porque por ejemplo en nuestro país el máximo de entradas que se pueden adquirir de golpe son 10 por persona. Convierten así su actividad en una operación casi cercana al riesgo cero: compro 1.000 entradas para algo infalible como es el concierto de Adele, que hay millones de personas demandando unos pocos miles de asientos-, las revendo a un elevado precio y, en el peor de los casos, me van a devolver casi todo el dinero si cancela. Esto es el fenómeno ‘scalping’ mencionado antes.

¿Qué hacer contra esto? en España, sólo cambiar la ley para que se tenga en cuenta Internet. Una ley que nació contra la reventa callejera, que sigue dándose a día de hoy, para evitar problemas al que compra “en la acera”, ya sea en la calle o contactando por redes sociales con un particular, el cual te puede colar una entrada falsa y es bastante difícil demostrarlo identificar al estafador. La solución modificar la ley, ya que en Internet también te la pueden colar.

Otras opciones serían que los vendedores luchen contra el problema de los bots, siendo alguna de las sugerencias: reforzar los límites de compra, analizar los datos de ventas para identificar las compras mediante bots, o investigar a los revendedores habituales de un buen número de entradas, entre otras soluciones.

EVENTOS DEPORTIVOS, CONCIERTOS, TEATRO, TOROS…

En las reventas, podemos diferenciar varios sectores, ya que cada espectáculo que complete el aforo máximo o personas que no haya podido coger una entrada, tiene esta vía para disfrutar del acto.
Los ‘reventas’ se aprovechan mucho de los eventos deportivos de alto nivel, como partidos de fútbol, baloncesto… etc. Por ejemplo, en la final de la Champions League de 2018, que se celebraba en Kiev, en Liverpool, la reventa superaba los 17.000 euros en una entrada, o en los Estados Unidos, donde el sonado ‘efecto LeBron James’ en Los Ángeles ha hecho dispararse los precios de la reventa, donde sillas a pie de pista, han llegado a rondar unos 27.000 dólares (23.500 euros aproximadamente). Eso siendo un partido simple de temporada regular.

Partido de la Euroliga de baloncesto en el WiZink Center.

Sin embargo, en EEUU hay una empresa de reventa, llamada Vivid, dio a conocer el incremento que sufrió concretamente este partido con respecto a dos años anteriores, donde las reventas estaban en torno a 161 y 192 dólares, y este año solo en un encuentro ha subido a 652.
Los que regentan este negocio, tienen muchas salidas como podemos apreciar, y en EEUU hay otro evento deportivo que suscita mucha emoción para el espectador y vamos a profundizar en contar sus datos. La SuperBowl, un espectáculo por el cuál la NFL, marcas publicitarias, la ciudad organizadora y muchas otras, multiplican sus beneficios. Para empezar, hablamos de que una entrada en taquilla, cuesta entre 850 y 1.800 dólares, precios que en familias que aman este deporte, se lo quieren permitir. Pero la reventa se dispara de 2.850 dólares hasta 16.200 dólares, es decir se multiplican de un 300% la mínima, a 900% la máxima. Estos datos muestran un claro beneficio de como los reventas se aprovechan de los grandes eventos deportivos.

En España, los eventos taurinos tienen mucho tirón entre los aficionados, lo que supone una demanda importante de entradas. Los ‘reventas’ actúan también por las plazas de toros. Pero hay un caso que permite la Comunidad de Madrid. En la plaza de toros de Las Ventas, hay un servicio permitido de reventas de entradas, con más impuestos de lo normal, sin embargo, si se permite en un caso exclusivo.

Aun así, seguimos viendo que esto no supone ningún problema para revender entradas. Vemos en páginas web, como son MilAnuncios o StubHub, ventas de entradas de gente que no puede acudir a la corrida de toros y vemos que se disparan los precios también, pero no llegan ni mucho menos a los mencionados anteriormente.
En Pamplona, en la tradicional Feria del Toro 2017, la reventa aumentó hasta los 200 euros por ver a Cayetano y a Roca Rey, triplicando sus precios de entrada, aprovechándose del tirón que tuvo en su momento este cartel de toreros.

Otro de los sectores donde es muy común la reventa es las obras musicales o conciertos. Sigue siendo muy parecido a lo visto en los otros dos sectores que hemos investigado. Musicales como el Rey León tienen mucha tirada entre los espectadores y esto es aprovechable para los comerciantes de entradas, o el fenómeno de Operación Triunfo, donde vimos este pasado verano, que provocó un lleno en el concierto ofrecido en el Santiago Bernabéu.

Grandes colas para la adquisición de entradas en el Bernabéu.

Sin embargo, obteniendo la información necesaria, hemos visto en portales web, artículos de periódicos, donde dicen que la mitad de las entradas de reventa se venden por debajo del precio inicial. Es decir, nosotros tenemos el estereotipo de que una reventa, habitualmente, dobla o triplica el precio inicial, pero en portales como eBay y el mencionado StubHub, ha analizado precios en sus portales, donde en ocasiones hay auténticas gangas. Pero esto no es siempre así. Estas entradas suelen ser de gente que las cuelga en estos portales, porque no puede acudir al evento, y solo intenta recuperar una parte de lo invertido.

Como hemos dicho, esto son ‘ocasiones especiales’. Hace año y medio, Joaquín Sabina estaba de gira y la plataforma de reventa Viagogo, vendió localidades de un concierto inexistente en A Coruña. No solo eso, sino que las entradas durante la gira de Sabina no superaban los 90 euros, en este evento rondaban los 560 euros.

Mucha gente clamó contra este caso, como periódicos, promotoras, clientes estafados… hay que tener mucho cuidado.

Investigando en la web, vemos como se revenden entradas para los musicales de Dirty Dancing o el Rey León. En Atrapalo.com se pueden comprar entradas para el Rey León por 24 euros, mientras que en MilAnuncios, la reventa está a 105 euros. El precio se multiplica por cuatro de su precio inicial. Con Dirty Dancing, pasa lo mismo. El precio de entrada oscila los 27 euros. En la reventa, suben a 90 euros mínimo.
Seguramente, el precio de la reventa allí en el teatro, minutos antes de que comience la obra, subirá otro alto porcentaje, aprovechándose así de la desesperación de los asistentes a la obra musical.

EL FRAUDE

Aparte del tema de la legalidad, la reventa tiene otro gran problema: el fraude. Existen miles de casos de gente que ha sido estafada por comprar las entradas a última hora mediante esta vía.
Una vez que pagas el precio asignado por el vendedor, lo suyo sería poder acceder al evento, pero hoy en día ya no te puedes fiar de nadie, y en ocasiones pagas de más para nada. Hemos encontrado varios casos y de todo tipo de gente que le salió mal la jugada de la reventa.

La clásica en este tipo: las entradas son falsas. Casos como este son los más frecuentes, compras la entrada y a la hora de la verdad resulta que es falsa. Ante esta situación ya te tienes que buscar la vida, si la compraste vía on-line puede ser más fácil rastrear y encontrar el problema, pero si te la ha vendido una persona en lo aleñados de un gran evento posiblemente no la vuelvas a ver. Siempre es recomendable denunciar los hechos. Esto no garantiza que te devuelvan tu dinero, pero estás evitando que otras personas sean estafadas, y estás poniendo a las fuerzas de seguridad en alerta. Aquí encontramos varios ejemplos de gente estafada, como el caso de un par de jóvenes que compraron entradas vía on-line para un concierto y al pasar el código de barras se encontraron con el pufo.

Otro tipo de fraude con el que nos hemos topado son las agencias. Las agencias compran entradas a granel y luego las ofrecen a un precio más alto o en packs. Pues bien, contactamos con un afectado que no ha querido salir en las cámaras. Se trata de un fraude que sucedió en la final de Mundial de 2010. Nuestra víctima, compró mediante una agencia viaje más entradas para asistir al evento. La agencia vendió ese pack a cien personas, y una vez ya en suelo africano, una empleada confesó que no tenían entradas para todos.

Hace un par de semanas fueron detenidas siete personas y registradas doce empresas por la operación Duarte, la cual investiga una trama millonaria de falsificación de entradas para los partidos del FC Barcelona en el Camp Nou. La causa de esto se encuentra en los socios, que ceden su abono a empresas a cambio de dinero.