TIPN: comprender cómo es la vida de los otros
“He escogido un género (el periodismo) donde las voces humanas hablan por sí mismas”. Svetlana Aleksiévich, escritora bielorrusa y Premio Nobel de Literatura en 2015, tiene claro que una de las peculiaridades de “el oficio más bonito del mundo” es dar voz a los que no la tienen, ser el altavoz de esa sinfonía de sensibilidades heterogéneas que es la ciudadanía.
La labor del contador de historias no es en rellenar columnas impresas sino tratar de hacer del mundo un lugar mejor con la palabra y la razón como herramientas indispensables.
Y es que hacen falta periodistas para dejar constancia de lo que otros quieres tapar, tal y como defiende Alma Guillermoprieto, reportera mexicana y Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades 2018, pues el quehacer cotidiano del informador pasa, como apunta Ryszard Kapuściński, por encender la luz para que la gente vea cómo las cucarachas corren a ocultarse.
Por eso, este grupo de trabajo, integrado por Thereza Vitalo, Ignacio Gallego, Pilar de la Vega y Nadia Jiménez, persigue percibir cómo respira la realidad a través de sus poros para después elaborar un relato coherente, preciso y transparente con el fin de que el lector obtenga sus propias conclusiones.
- Thereza Vitalo: nació en Brasil en 1998 y este curso la Facultad de Ciencias de la Información de la Complutense será su segunda casa, pues pasará este año en España tras obtener una beca Erasmus. Si hay algo que le apasiona es la cultura, en especial el mundo del cine.
- Nacho Gallego: natural de Talavera de la Reina (Toledo), ciudad donde nació hace 21 años. Sus preferencias en el periodismo pasan por la información política, económica e internacional, aunque en el último año ha descubierto las potencialidades del periodismo local, una escuela para los que quieren aprender la profesión desde las situaciones más cotidianas.
- Pilar de la Vega: aunque nació en Madrid, ahora vive en un municipio próximo a la capital, Ajalvir. Su afición al periodismo arranca cuando comenzó a escribir en talleres de escritura. Una de las ramas de este oficio que más le impresiona es el periodismo de investigación. Entre sus gustos, destaca el cine, el tenis y los animales. Cree en una información construida desde la justicia y la libertad.
- Nadia Jiménez (22 años): la escasez de medios de comunicación en su ciudad natal, Málaga, donde ha crecido hasta la mayoría de edad, le ha impulsado a venirse a Madrid para emprender una carrera como periodista. De los objetivos con los que comenzó la carrera, a día de hoy no perdura ninguno aunque lo que si permanece es su concepción del oficio de informar como sinónimo de libertad, heterogeneidad y tolerancia.