Rompiendo barreras

Fachada del establecimiento en Juan Bravo / Fuente: Isabel González Clavero

• Son pocos los restaurantes basados en un proyecto de inclusión social

• El 70% de la plantilla de trabajadores de ESPLORE está formado por personas con algún tipo de discapacidad

En pleno siglo XXI sigue siendo muy difícil encontrar bares y restaurantes que incluyan en su plantilla a personas con discapacidad o que tengan infraestructuras destinadas para el acceso de todo tipo de público. El Grupo ILUNION fomenta la existencia de empleo cualificado para personas con discapacidad física o sensorial, y restaurantes como ESPLORE comulgan con esta filosofía y brindan accesibilidad y comodidad en sus restaurantes.

Son muchos los restaurantes que podemos encontrar en Madrid. La mayoría, lugares agradables e ideales para pasar un buen rato degustando sus platos pero, ¿se sentiría cómoda una persona que necesita moverse en una silla de ruedas? ¿y una persona ciega? Posiblemente la respuesta sea no. Y, sin embargo, estas son solo algunas de las cuestiones que nunca paramos a formularnos cuando, quienes no convivimos con una discapacidad, acudimos a almorzar, comer o cenar a cualquiera de los miles de restaurantes de nuestra ciudad.

Por ello, algunos restaurantes pioneros en la iniciativa de crear un espacio adecuado para todo tipo de público están llevando a cabo una labor tan importante. Ejemplo de ello es Universo Santi, un restaurante en Jerez de la Frontera cuyo servicio está compuesto íntegramente por personas con discapacidad, sobre todo ha contribuido a la reinserción de personas con síndrome de Down. En la capital, nosotras encontramos un pequeño y coqueto restaurante, que no sólo llama la atención por su cuidada decoración y sus exquisitos platos, sino que además proporcionan el lugar que se merecen a las personas que tienen algún tipo de discapacidad.

Símbolos que representan la accesibilidad del local / Fuente: Elena García Tundidor

Cadena ESPLORE

Es en Madrid donde se encuentran los dos restaurantes que conforman la cadena ESPLORE. Su objetivo de hacer llegar su cocina a todo tipo de público, sin olvidarse de las personas que tienen algún tipo de discapacidad. Los locales se caracterizan por estar dotados de instalaciones especiales y contar con una plantilla en la que el 70% de empleados tienen algún tipo de discapacidad.  

El origen de los restaurantes ESPLORE está en el Grupo ILUNION, que en 2017 decide lanzar esta nueva línea de actividad dentro del marco de la restauración. El delegado del grupo Antonio Barea, afirma que su máxima es conseguir que al entrar al local nada resulte fuera de lo normal y que, a su vez, esté totalmente equipado para cualquier persona con discapacidad. Destaca también que, aunque no lo parezca, cada elemento de la decoración tiene sentido y lleva a cabo su papel.

Los locales están situados en la calle Clavel, 5 y Juan Bravo, 41 y siguen la filosofía del Grupo ILUNION, que consiste en desarrollar proyectos empresariales que sean sostenibles tanto de forma económica como social, cuyo fin de crear empleo de calidad para las personas con discapacidad, mediante la aplicación de herramientas y apoyos. Con todo ello, se pretende llevar a cabo una verdadera inclusión social y laboral.

Cartel de la consejería de empleo / Fuente: Isabel González Clavero

Infraestructuras e instalaciones adaptadas

Los dos establecimientos están completamente adaptados para personas con discapacidad visual, auditiva o que se desplacen en sillas de ruedas. Entre las instalaciones podemos encontrar baños accesibles, un bucle magnético para que aquellos que utilizan audífonos perciban la información sonora más limpia, beepcons o balizas inteligentes que permiten a los usuarios ciegos desplazarse por el local. Además, hay una barra a doble altura, cubertería adaptada y carta en braille.

En definitiva, ESPLORE lleva a cabo una apuesta que deberían de seguir más locales para facilitar el acceso a las personas con discapacidad que, en muchas ocasiones, no pueden desplazarse cómodamente dentro de  los establecimientos, leer la carta o tienen que ir acompañados por familiares.

Se debe promover la integración de los servicios de atención a este colectivo tanto en accesos a instalaciones como en oportunidades de trabajo. La normalización que ello requiere es fundamental  para lograr garantizar la calidad de vida de estas personas. Aunque se hayan dado algunos pasos, las barreras que se producen en este campo siguen ahí, cuando deberían de ser eliminadas de raíz. Desde la Fundación ONCE defienden que el empleo para personas con algún tipo de discapacidad no solo sea accesible sino además de calidad, en este caso ESPLORE cuenta con dos terceras partes de este colectivo, cuando la legislación obliga a contar como mínimo con un 2%.

Pero no se trata únicamente de un proyecto de inclusión social, sino que además es un restaurante que complace al buen gusto. La carta incluye numerosas opciones para los paladares más exquisitos. El menú gira alrededor de los productos más representativos de la gastronomía española: el vino, el queso, el aceite, etc. Su producto por excelencia es el cerdo ibérico, en sus diferentes variantes.  

Como guiño al nombre de nuestro país, la cadena de restaurantes, decidió cambiar la `x´, por la `s´ en el nombre de ESPLORE, cuyo significado hace referencia a la exploración y el descubrimiento de los más exquisitos sabores mediterráneos. A través de su carta, guían al comensal en un viaje por España, trasladándose a diferentes puntos del país con recetas gallegas, asturianas, extremeñas y madrileñas, todas ellas con ingredientes seleccionados desde el origen. En la carta destacan los menús degustación que muestran los sabores de nuestro país. Sin olvidarnos de la bodega, que incluye más de una treintena de referencias de todas las denominaciones de origen. Además, la mayoría de los productos se pueden comprar en el área de tienda.  

Selección de productos a la venta en el restaurante / Fuente: Elena García

Ejemplo de fusión entre el buen comer y la inclusión social de sus proyectos, el restaurante organiza cenas en las que los comensales deben permanecer con los ojos vendados durante la velada, de tal forma que la empatía hacia las personas ciegas aumenta, a la par que se descubre un mundo diferente en el que el resto de sentidos se desarrollan aún más, sobre todo, el del gusto.

Planes de futuro

Lo más probable es que en un futuro no muy lejano podamos disfrutar de sus platos e instalaciones en nuevas localizaciones. Antonio Barea afirma que tienen previsto terminar 2021 con diez locales abiertos, y no solo en la Comunidad de Madrid, por lo que es posible que se expandan de forma nacional.

Este proyecto  es un desafío que tiene  como objetivo eliminar las barreras, ofrece un trabajo de calidad a personas con discapacidad y total accesibilidad con espacios diseñados para todos. Sin olvidarnos que ofrece un menú que recoge todos los sabores de nuestro país, atreviéndose con recetas únicas, pero sin perder la esencia española. Toda una experiencia gastronómica singular que apoya la inclusión social de este colectivo, de la cual podemos disfrutar actualmente en Madrid

Barra a doble altura pensada para las personas con silla de ruedas / Fuente: Isabel González Clavero y Elena García Tundidor