Entre menús y libros
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El catering servido en muchas de las cafeterías universitarias depende más de criterios económicos que alimenticios
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La mayoría de alumnos escogen la facultad de Odontología como la mejor para comer
La universidad no es solo libros, apuntes y estudio. También hay tiempo para el descanso y el relax; para fomentar las relaciones sociales con otros miembros de la comunidad educativa. Las cafeterías son escenarios óptimos para esos momentos de ocio y esparcimiento. Y si no es necesario salir del recinto universitario, mejor.
Hoy en día, todas las facultades ofrecen un servicio de restauración. En algunos casos, se trata sólo de cafeterías en las que los estudiantes, los profesores y cualquier persona vinculada con la universidad puede tomar algo, reunirse o hacer un descanso. En otras ocasiones, el servicio de cafetería viene complementado con el de restaurante, teniendo en cuenta que muchas personas se quedan a comer en el centro de estudios por falta de tiempo o por comodidad.
Son muchas las cafeterías que nos encontramos en el entorno de Ciudad Universitaria. Por precios relativamente asequibles, cada día dan de comer a miles de estudiantes. Pero muchos de ellos se quejan de lo agreste del servicio y la mala calidad de las comidas. No todas comparten empresa matriz, pero muchas de ellas, como la de Ciencias de la Información, están gestionadas por Ramiro Restaurantes.
Ramiro Restaurantes sirve tu comida
Aunque Ramiro Restaurantes presta servicio a varias universidades, hay que destacar que únicamente en el entorno de la UCM y la UPM esta concesionaria lleva las cafeterías de la propia Ciencias de la información; de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos; de la facultad de Filosofía B; de la E.T.S. de Edificación; de la E.T.S. de Ingeniería y Sistemas de Telecomunicación; de la E.T.S. de Ingeniería y Diseño Industrial; de la E.T.S. de Ingenieros de Telecomunicación; de la E.T.S. de Ingenieros de Montes; de la E.T.S. de Arquitectura; y del Centro de Apoyo a la Innovación Tecnológica.
Hablamos con la responsable de Ramiro Restaurantes para la cafetería de Ciencias de la Información. Aunque no quiere que su nombre se publique, ella nos confiesa que además de ejercer como enlace entre empresa y universidad, se encarga de supervisar el trabajo de una plantilla compuesta por una docena de empleados, repartidos en cocineros y camareros. Según sus palabras, la cafetería tiene un volumen aproximado de entre 250 y 300 menús diarios. Esa cifra se reduce considerablemente en la cafetería de profesores, donde no se superan los 50 diarios. El precio del menú es de 4,95 euros, una cantidad a la que se llegó hace dos años mediante acuerdo entre empresa y facultad.
El menú varía diariamente en función de la temporada, ofertando productos que se dicen de calidad y saludables. La empresa adjudicataria se debe asegurar que dispone de una dieta equilibrada. Dos criterios fundamentales para elegir un catering son el criterio económico y técnico (ofertar productos naturales, frescos, no transgénicos, sostenibilidad, vajilla retornable, etc). Anteriormente cada uno contaba con un valor de 50%, este año desde el Rectorado se ha dado más importancia al criterio económico (80%) que al técnico (20%).
Los días de mayor afluencia coinciden con los tres primeros de la semana, donde el volumen de asignaturas y clases es mayor a los del jueves y viernes. Estos días se suelen aprovechar para incluir las opciones más populares dentro del menú, como son el caso de la paella o la pasta, dejando los días con menor afluencia de estudiantes para las opciones más impopulares, como la verdura o el pescado.
Un día cualquiera en la cafetería de Ciencias de la Información
- Menú 1. Fideúa y albóndigas
El menú incluye un primer plato de fideúa alicantina y un segundo de albóndigas en salsa con una guarnición de patatas fritas. De postre, un par de mandarinas.
- Menú 2. Patatas guisadas y mero
En este menú, el primero consiste en unas patas guisadas con ternera, mientras que el segundo es un filete de mero al horno con guarnición de patatas fritas. El postre, un plátano.
- Menú 3. Patatas y albóndigas
Este menú es un híbrido entre los otros dos. Consiste en un primer plato de patatas guisadas con ternera y un segundo de albóndigas en salsa. El postre es una ‘mousse’ de chocolate. El menú adolece de un exceso de carne roja, cuyo consumo se recomienda de forma esporádica. Además, hay un exceso de fritura que coincide en el plato con las albóndigas y faltan verduras. Finalmente, el postre tiene muchos azúcares simples.
Difícil si no comes de todo
Aunque hemos comprobado que la elaboración de platos para celiacos, veganos y vegetarianos está presente en cafeterías como las de Ciencias de la Información, Medicina u Odontología, los estudiantes reclaman que la oferta debería ser aún mayor. Tan solo en la facultad de Odontología elaboran menús exclusivos, a destacar un menú especial de 10 euros y un menú dietético. Además, la variedad de platos elaborados para celíacos es considerablemente mayor en esta facultad a la oferta que encontramos en el resto, donde se limitan a incluir uno o dos platos dentro del menú general que se ofrece al resto de estudiantes.
Es llamativa la diferencia alimenticia en universidades públicas, como la nuestra, y privadas, ya que los rígidos umbrales económicos de buena parte de la universidad pública complican la puesta en marcha de nuevos y buenos comedores. Al final las diferencias acaban reflejadas en que los centros privados, como la Francisco de Vitoria resultan más satisfactorios en todos los aspectos (rapidez, atención, tamaño de las raciones o calidad), exceptuando el precio.
Un estilo de vida poco saludable
En la población universitaria se suelen asociar sus hábitos alimentarios y de estilo de vida con la irregularidad en el patrón de comidas, el consumo elevado de comida «rápida» y de bebidas con contenido alcohólico, el seguimiento de dietas nutricionalmente inadecuadas con baja densidad nutricional, la elevada incidencia de los trastornos de la conducta alimentaria, etc. Que, unido a un incremento de los requerimientos nutricionales, dificultan el seguimiento de dietas saludables y equilibradas. Por otro lado, se producen unos estilos de vida muy diferenciados de unos a otros, que van desde el sedentarismo hasta la práctica del deporte de competición, dificultando aún más la valoración nutricional de este grupo y los mensajes correctos a transmitir.
A la hora de elegir la mejor cafetería de la Universidad Complutense de Madrid los estudiantes suelen tenerlo claro: Odontología; la variedad de sus platos, la calidad de los alimentos y la atención agradable del personal, han hecho que tengan la fama de ser la mejor cafetería de todo el entorno de Ciudad Universitaria.