Fútbol modesto, la otra cara del juego

Los jugadores charlan antes de entrenar / Iñigo Fuertes

• Las diferencias económicas entre el fútbol profesional y el fútbol modesto son enormes

• Multitud de equipos tienen las mismas adversidades que el Deportivo L.F.C.

De sobra es conocido que el fútbol en España está considerado como el deporte rey. Es así, para suerte o para desgracia de algunos. Una gran cantidad de hombres y mujeres lo practican diariamente, ya sea por puro entretenimiento o porque compiten de manera amateur o profesional.
En el año 2018, el fútbol profesional generaba aproximadamente más de 4.000 millones de euros, lo que suponía un 1,07% del producto interior bruto (PIB). Unas cifras de gran magnitud y que resultan imposible de superar por cualquier otro deporte en España.
Aun así, lo que diferencia a los equipos profesionales de los equipos más modestos son las enormes diferencias que existen en el marco económico.

El Deportivo L.F.C

Escudo del Deportivo LFC / Iñigo Fuertes

El fútbol modesto ocupa muy pocas páginas en los medios de comunicación. Y eso si hablamos de los equipos de Segunda División B, pero en categorías más bajas no se aprecia ninguna mención excepto que ocurra algo excepcional. El Deportivo LFC es uno de esos conjuntos que nunca saldrá en un periódico. Un equipo modesto que se fundó allá por el año 2008, cuando varios padres decidieron crear un equipo para que sus hijos jugaran al fútbol. Con el paso de los años, ese equipo juega en segunda regional, tras haber ascendido el año pasado.
El subir de categoría les ha permitido dar un paso hacia adelante en su proyecto. Ahora es más fácil contratar a un entrenador y a varios componentes del cuerpo técnico. Este año lo forman un grupo de 5 personas, cuándo en años anteriores no superaban las 2 o 3. Son pequeños cambios, pero que tienen mucha importancia dentro del equipo. El Deportivo LFC juega en un campo de césped artificial en el Centro Deportivo Municipal La Elipa. Allí entrenan los martes y los jueves a última hora del día, mientras que el fin de semana disputan en ese campo los partidos en los que son locales. Su afición está formada por amigos y familiares de los jugadores, que cada día de partido van a darles su apoyo.

¿Cómo se financia un equipo modesto?

Campo de fútbol de La Elipa / Iñigo Fuertes

El marco económico es muy importante. Aún más cuándo los recursos con los que se cuenta rozan lo escaso. Quién se encarga de esta tarea es el presidente del club. Pablo Stuyck compagina su labor como cara visible del proyecto junto a su función de jugador. Nadie mejor que él sabe las dificultades con las que se puede encontrar un equipo que cuenta con 10.000 euros al año de presupuesto. Una cantidad a la que se llega tras la suma de las cuotas de los jugadores, las aportaciones de los patrocinadores y la venta de lotería en navidad.
El dinero que aproximadamente pagan cada uno de los jugadores ronda los 350 euros al año. Un precio asequible y para nada exagerado. En realidad, se paga lo mismo que apuntarse al gimnasio durante un año pagando una cuota de 30 euros al mes. Con esta recaudación se paga el alquiler del campo -entre 1.000 y 1.500 euros al año- y el sueldo del árbitro en los partidos en los que juegan como locales, que suele ser de 90 euros por partido.

Patrocinadores

Una parte importante del proyecto es el apoyo de los patrocinadores. El principal es Value Tree, una empresa dedicada a la asesoría de inversiones. Su importancia es tal, que su nombre aparece en las camisetas de todos los jugadores. Luego hay otros dos patrocinadores cuya aportación es algo más limitada. Se podría decir que es más un intercambio recíproco de intereses. Airport Tavern es un restaurante que se encuentra en la Calle Serrano Nº232. Allí se realizan las cenas de equipo y las reuniones. Se le considera como el bar del equipo. Una administración de lotería es el otro patrocinador. En navidad el Deportivo LFC vende la lotería de esta administración.
Algo que se realiza desde el equipo en la búsqueda de más dinero, es la presencia en las redes sociales. Actualmente no reciben ningún ingreso gracias a ellas, pero en un futuro no es descartable. Aún así en sus redes se sube contenido del equipo como, por ejemplo: fotos del once titular, foto del MVP del partido… En todas esas publicaciones se menciona al principal patrocinador.

La afición por el fútbol

Jugadores entrenando en el campo / Iñigo Fuertes

La pasión por este deporte es lo que permite al Deportivo LFC seguir creciendo. Álvaro Palou -capitán del equipo- considera que son los propios jugadores los que mantienen al club. Tanto él como el resto de sus compañeros sacrifican muchas cosas para cumplir con las exigencias del equipo. Ninguno de ellos vive del fútbol y la gran mayoría estudia o trabaja, por lo tanto, el tiempo que le dedican al fútbol lo podrían invertir en hacer otras cosas. Antonio Yrizar puede dar fe de ello tras llevar más de 10 años defendiendo los colores del Deportivo LFC. Para él esto ya es una rutina que se escapa del terreno de juego. Con el paso de los años ha creado amistad con los compañeros, por lo que para él los entrenamientos y los partidos significa ir a divertirse con sus amigos. Pero también tiene un gen competitivo que le obliga a esforzarse cada día más. Estar en forma y probarse a uno mismo es la receta que utiliza para seguir viniendo con la misma ilusión año tras año.

Fútbol profesional y fútbol modesto son muy diferentes económicamente.

Balones de fútbol / Iñigo Fuertes

Todo lo que mueve el fútbol profesional en España es enorme. Ya sea dinero, afición o multitud de sentimientos. Sin duda la mayor diferencia con el fútbol modesto se encuentra en la economía de un club. Andrés Rodríguez sabe muy bien cómo funciona el mercado de patrocinadores. Desde el año 2007 hasta el 2013 gestionó los patrocinios de la Federación Española de Fútbol, coincidiendo con la época gloriosa de la selección al ganar 2 eurocopas y 1 mundial. Considera que el fútbol en sí es un producto muy rentable. Prueba de ello, es que en esos años fueron muchas las empresas que se ofrecían para ser parte de la Selección Española de fútbol. Desde marcas líderes en el sector automovilístico hasta grandes marcas de telefonía móvil. Todas ellas querían formar parte, pero a cambio tenían que invertir una gran cantidad de dinero. Ese tipo de inversiones son las que hacen falta en el resto de categorías, para intentar aumentar los ingresos de los equipos más modestos.
Si la selección española de fútbol ya genera tanto, los equipos de primera división están un peldaño por encima. La diferencia es abismal entre los tres equipos con más presupuesto de La Liga Española. Barcelona, Real Madrid y Atlético tienen más presupuesto juntos que el resto de los 17 equipos de primera división. Con semejantes cifras, es fácil entender la diferencia entre fútbol profesional y fútbol modesto en la materia económica.