Un legado para la eternidad

Diego Armando Maradona levantando la Copa del Mundo en 1986 / Fuente: AFP

• Ascenso y declive de la figura de Diego Armando Maradona a raíz de su fallecimiento

• 13 periodistas deportivos argentinos explican el impacto de la figura del ‘Pelusa’ en su país natal

Diego Armando Maradona ha sido una de las figuras más relevantes, no solo a nivel deportivo, sino en el panorama mundial, que ha dejado multitud de imágenes para la historia. Sus jugadas, sus regates, su gol ante Inglaterra en 1986, sus errores, su vida personal… todo ello forman parte del legado que deja el que es, considerado por muchos, el mejor jugador de fútbol de todos los tiempos. Su historia es bien conocida por todos, tanto admiradores como detractores, pero ahora serán periodistas deportivos, compatriotas de “El Pelusa”, quienes revivan sus momentos más relevantes a través de sus propias visiones personales.

Orígenes

Diego Armando Maradona nació en Lanús (Buenos Aires) el 30 de octubre de 1960 en el seno de una familia de clase baja que residía en un barrio muy precario y humilde como Villa Fiorito. Desde bien joven empezó su amistad con el fútbol al ingresar en un equipo infantil llamado Las Cebollitas, perteneciente a la cantera de Argentinos Juniors, donde salió campeón de los Juegos Nacionales Evita. “El Pelusa” abandonó sus estudios de secundaria y afianzó su relación con el balompié, debutando en la Primera División de Argentina en 1976, a días de cumplir los 16 años, de la mano de Argentinos Juniors en un partido ante Talleres de Córdoba. Desde ese momento Maradona empezó a concentrar todos los focos en su figura, llegando incluso a estar a punto de ir convocado con Argentina para el mundial de 1978 y ganando la Copa del Mundo sub-20 en 1979, siendo nombrado mejor jugador del torneo.

En palabras del periodista de DIRECTV, Nicolás Haase: «Diego convivió desde los 16 años con una popularidad y una exposición pública que nadie soportaría. 24 horas y 365 días de cada año, sin un minuto de intimidad».

Nicolás Haase, periodista de DIRECTV Sports / Fuente: Instagram (@haasenico82)

Maradona permaneció en Argentinos Juniors durante cinco temporadas (1976-1981) donde, tal y como cuenta el periodista de Revista 1986, Germán Balcarce, «salió cinco veces consecutivas como goleador del campeonato». Para la temporada 1981-82 Maradona ficharía por un histórico del fútbol mundial: Boca Juniors. La buena temporada que realizó, saliendo campeón del Torneo Metropolitano y anotando 28 goles, le permitió asistir a su primer mundial en España 82′, donde anotaría sus primeros goles como mundialista frente a Hungría, pero que finalizaría con la eliminación de la selección argentina en segunda ronda frente a Italia y Brasil.

Llegada a Europa: FC Barcelona, lesiones y la droga

Tras terminar el Mundial de 1982, Maradona hizo las maletas con destino a Europa, concretamente al FC Barcelona. Esta experiencia sería el gran reto que venía acaparando los focos en su país natal. Sin embargo, su carrera sufriría el primer revés en la ciudad condal. En primer lugar, tras un buen arranque marcando 6 goles en 13 partidos, el astro argentino fue diagnosticado de hepatitis, lo que le obligó a estar fuera de los terrenos de juego durante varios meses.

Maradona en su presentación como nuevo jugador del Barcelona / Fuente: infobae

Para Fabián de María, periodista en DIRECTV Sports, Maradona «se autocastigó con los vicios y las drogas (…), eso seguramente no le permitió dar el 100%».

Diego Armando Maradona prácticamente se perdió toda la temporada 1982-83, donde salió campeón el Athletic Club de Bilbao y el FC Barcelona solo alcanzó la cuarta posición, aunque se alzó campeón de la Copa del Rey y la ya extinta Copa de la Liga, ambas ante el Real Madrid. Para la siguiente temporada todas las esperanzas estaban puestas en el argentino, sin embargo, la mala suerte le golpearía aún más fuerte. En el comienzo de la liga, sufriría la rotura de su tobillo izquierdo tras una dura entrada de Andoni Goikoetxea.

Según Sebastián Quadrelli, periodista de DIRECTV Sports, «ese partido ante el Bilbao en el que se fractura fue un antes y después. Tenía la presión de ser el mejor del mundo y con esa fractura todo se le vino encima».

Sebastián Quadrelli, periodista de DIRECTV Sports / Fuente: Instagram (@sebastianquadrelli)

Maradona se despediría del FC Barcelona en la final de Copa del Rey ante el Athletic Club, donde el equipo vasco se alzó con la victoria. Sin embargo, el momento más recordado vino con el pitido final, donde se formó una enorme tangana entre los dos equipos que desembocó en una abochornante batalla campal. La experiencia de Maradona en el club catalán llegaba a su fin con un balance personal decepcionante, por lo que buscó un nuevo reto en otro país.

Martín Costa, periodista de TNT SPORTS, cree que «aquella lesión quedó mucho más marcada que su paso en sí”, mientras que Leandro Aguilera, periodista de TyC SPORTS, piensa que “le faltó tiempo (..) podría haber triunfado tranquilamente, pero la diligencia decidió venderle».

Martín Costa, periodista de TNT SPORTS / Fuente: Whatsapp

Mundial de México: La actuación del siglo

El Campeonato del Mundo de 1986, el segundo que disputaría Diego Armando Maradona, marcó indudablemente un antes y un después en la carrera del astro argentino. La selección albiceleste, campeona por primera vez 8 años antes, en su propio país, llegaba con el objetivo de intentar repetir el hito para aprovechar especialmente la figura del jugador del Nápoles, que venía en un momento de forma excepcional. Aunque no solo esa, pues la escuadra estaba formada por otros grandes nombres, empezando por el banquillo, donde comandaba Carlos Salvador Bilardo, y continuando por un hilo de grandes jugadores, como Óscar Ruggeri, Sergio Batista, Jorge Burruchaga, Jorge Valdano o Daniel Passarella, que finalmente no pudo disputar el torneo.

La baja de este jugador, sin embargo, fue la última piedra de un camino especialmente accidentado antes de llegar al país azteca. La ilusión por ganar el Mundial era superior a la realidad, pues la selección se encontraba en un alto punto de cuestionamiento, tras clasificarse para el Mundial en los últimos minutos del último partido, sin exhibir un gran juego, y con grandes presiones hacia el seleccionador para su destitución, algo que finalmente no se produjo. Argentina se presentó en México perdiendo los amistosos de preparación previa contra rivales muy inferiores, pero con la figura de Maradona como reflejo del intento de milagro de acabaría por producirse.

Maradona junto con Daniel Passarella / Fuente: Cultura Redonda

Tras una buena fase de grupos, con dos victorias y un empate contra Italia, y superar a Uruguay en octavos, llegó un partido decisivo, el más esperado por toda Argentina: el de cuartos de final contra Inglaterra, donde Maradona, en su cita con la historia, explotó. En un encuentro tenso, marcado por el recuerdo de la Guerra de las Malvinas del 82 entre ambos países, Maradona realizó una de las grandes actuaciones de la historia del fútbol, marcando un gol con la mano, ‘La Mano de Dios’, y otro a base de regates desde el centro del campo hasta la portería, considerado el mejor de la historia de los mundiales. Un partido que, para los argentinos, se recuerda más que la propia final posterior contra Alemania.

Nicolás Biturón, de Radio Libre AM, explica la relevancia de este partido en base al recuerdo de la contienda de cuatro años atrás: «Somos un pueblo que lo de Malvinas lo sintió y lo sigue sintiendo, porque hay mucha generación que fue a la guerra y que la vivió. Entonces en ese momento fue una especie de venganza, de decir “bueno, sí, está bien, militarmente somos peores que ustedes, pero a fútbol no nos pueden ganar”, y ahí le ganamos».

Nicolás Biturón, periodista de Radio Libre AM / Fuente: Instagram (@nicolasbituron)

Gustavo Ortiz, corresponsal en AS y Marca, tuvo la suerte de vivir el partido y recuerda cómo lo hizo, tanto él como todo el país: «Casi me arrodillé mirando el televisor y nos abrazamos, lloramos… después con todos mis amigos y con gente de la calle nos paramos en una avenida, por la que pasaban micros y camiones, e iban todos al Obelisco a festejar, y te subías con ellos y te ibas. Así fue con todos los partidos, pero el partido Argentina-Inglaterra fue lo mejor, fue mucho mejor que la final contra Alemania».

Por último, Fabián de María expone su visión sobre el triunfo en el 86, recordando lo sucedido en Argentina 78’: «La selección había ganado un Mundial en el 78 en un contexto de dictadura que tal vez no dejan del todo muy limpio ese título, futbolísticamente ganó Argentina, pero el contexto era el peor posible, con desaparecidos y muchas situaciones trágicas». Sobre el Mundial del 86, «solo Maradona podría lograr algo así. No tenía nada que ver el fútbol o con la guerra, pero contra Inglaterra sí había algo especial después lo que habían padecido los chicos en las Malvinas, que fueron a pelear injustamente contra una Inglaterra completamente preparada para esas situaciones. Diego representó a todos los chicos, a todas esas familias, a todo el país, haciendo un gol con la mano, que eso ya también tiene algo épico, y por si quedaban dudas hizo el mejor gol de todos los tiempos».

Fabián de María, periodista de DIRECTV Sports / Fuente: WhatsApp

Reinado en Nápoles

Maradona se machó a Italia después de fichar por el Nápoles el 30 de junio de 1984. La leyenda argentina necesitó únicamente tres temporadas para darle al club napolitano el primer título de liga de su historia en la temporada 1986/87 (además de una UEFA en 1989, otra liga en 1990 y una Supercopa en 1991).

Patricio Burlone, periodista de TyC Sports: «Nápoles era una ciudad muy argentina, o, mejor dicho, los argentinos tenemos mucho en común con la pasión de los napolitanos. Ese contexto encajó a la perfección en Diego».

Patricio Burlone, periodista de TyC Sports / Fuente: Instagram (@patoburlone)

«Creo que la versión de Diego que vimos en Nápoles fue el mejor Maradona de todos, mucho mejor que el de Barcelona, Boca o incluso Argentinos Juniors. Allí él ganaba solo. Tenía una magia que motivaba a sus compañeros y provocaba que ganasen partidos», señala Gustavo Ortiz.

Pero no todo fue luz y color en el paso de Maradona por Nápoles. Allí empezó su relación con la mafia napolitana, la ‘Camorra’, provocada por la adicción que tenía por la cocaína: «Realmente creo que no llegó a alcanzar su pico máximo como futbolista debido a lo extradeportivo. Tuvo que luchar toda su vida contra el consumo de drogas», asegura Sebastián Quadrelli.

Gustavo Ortiz, corresponsal de AS y Marca / Fuente: gustavoortiz.com.ar

El mito

Con sus pros y contras, nadie puede dudar de que Diego Armando Maradona es uno de los personajes más importantes, no sólo del fútbol de su país, sino de toda la historia de Argentina. Todo lo que logró y significó para sus compatriotas provocó que se erigiese un legado que jamás se olvidará por mucho que pasen los años.

«Lo especial de Maradona es que su personalidad reflejaba todo lo bueno y lo malo de ser argentino. Encarnaba al pueblo tal y como era. Es la Unión de lo que pueden sentir y ser los argentinos. Ahí es donde radica su importancia», dice Víctor Romero, periodista de ESPN.

Víctor Romero, periodista de ESPN / Fuente: Instagram (@vromeroh05)

Fabián de María: «Diego está a la altura de los más históricos de Argentina, a la par de personalidades como fue el ‘Che’ Guevara, y más recientemente el Papa Francisco».

Leandro Aguilera aporta lo siguiente: «Existe incluso la idea de incluir su cara en uno de los billetes de aquí. Todo lo que ha logrado se podría considerar epopéyico. Conquistó el mundo saliendo de un barrio muy humilde y precario como era Villa Fiorito».

Leandro Aguilera, periodista de TyC Sports / Fuente: Instagram (@tato_aguilera)

Doping en EEUU 94′: Caída a los infiernos

El Mundial de 1994 significó un último revés para la carrera de Maradona. El astro consideraba el torneo su última oportunidad de redención, y más aún con la camiseta de la selección, a la que tanto le debía. Su carrera se había torcido en 1991, tras dar positivo por cocaína en un Nápoles – Bari, y después de una sanción de 15 meses sin jugar y de rendir a un aceptable nivel en el Sevilla y en Newell’s, se presentó en el campeonato con la intención de ofrecer un último servicio a su país.

No empezó mal el campeonato para el 10, pues arrancó marcando en el primer partido de la fase de grupos, contra Grecia, el gol que a la postre sería el último con la celeste y blanca. Tras finalizar otro encuentro, contra Nigeria, tuvo que someterse a un control antidoping, en el que le serían descubiertas hasta 5 sustancias con efectos estimulantes prohibidas por la FIFA. Así, la Federación Argentina, en connivencia con la Federación Internacional, decidió aplicarle otra sanción de 15 meses, lo que marcaría un antes y un después. Aunque tampoco sería su último apercibimiento, pues en 1997 sería castigado mientras jugaba en Boca por dar positivo por metabolitos de cocaína, lo que supuso el fin de su carrera en la práctica.

Maradona durante el Mundial de EEUU 1994 / Fuente: ABC

Sobre todo esto que le sucedió a Maradona en su vida personal, pero que acabó afectando a su carrera deportiva de manera decisiva, reflexionan varios entrevistados. Nicolás Haase comenta lo siguiente: «Quizá su mayor coherencia haya sido la de ser auténtico en sus contradicciones. La de no dejar de ser Maradona ni cuando ni siquiera él podía aguantarse. Nadie le dio a Diego las reglas del juego. Nadie le dio a su entorno (un concepto tan naturalizado como abstracto y cambiante a la lo largo de su vida) el manual de instrucciones. Nadie tuvo el joystick para poder manejar los destinos de un hombre que con los mismos pies que pisaba el barro alcanzó a tocar el cielo».

Germán Balcarce añade: «Maradona cometió muchos errores a nivel personal como también ha tenido grandes gestos que quedan opacados, porque Maradona era capaz de tener la actitud más soberbia por ahí y también podías tener efectos más solidarios que cualquiera pudiera imaginarse. Se sabe que difícilmente podía hacerle caso a alguien, pero también eso viene como producto de hacerle creer que era un Dios, fue un Dios del fútbol sin lugar a duda, pero humano como cualquier ser humano. También tuvo una vida muy difícil, en Nápoles por ejemplo no podía salir a la calle, así es muy complicado realizar una vida normal. Estoy convencido de que una parte del entorno lejos de ayudarlo lo perjudicó, porque no había que decirle todo que sí, había que bajarlo a la tierra».

Germán Balcarce, periodista y coordinador de ‘Revista 1986’ / Fuente: Instagram (@german_balcarce)

Martín Costa también comenta lo siguiente: «Uno no se puede poner en el lugar de la otra persona ante situaciones como le ha tocado vivir, pero él, en una de las tantas entrevistas que dio, siempre dijo que si no hubiese estado su vida relacionada con la droga hubiese sido mucho mejor de lo que fue. Es una lástima, pero así todo no nos privó de ver al mejor, al más grandioso de nuestras vidas».

Carrera como técnico

La aventura de Diego Armando Maradona en los banquillos comenzó durante la suspensión que le impuso la FIFA tras el positivo en el mundial de 1994. Su primer destino fue el Deportivo Mandiyú, donde solo duró un par de meses al frente del equipo. Su segundo destino sería un histórico del fútbol argentino: Racing Club de Avellaneda. El equipo estaba pasando una situación dramática, y tras dirigir al equipo durante 11 partidos, Maradona abandonó. Siempre se había esperado que Diego Maradona fuera técnico de Boca Juniors, su equipo, o algún club importante como el Nápoles, pero nunca se dio.

Nicolás Latini, periodista de TNT SPORTS, defiende que nunca llegó a dirigir esos clubes «porque los dirigentes de turno, injustamente, nunca le dieron la posibilidad (…) de hecho, peores entrenadores ocuparon ese rol en esos equipos».

Nicolás Latini, periodista de TNT SPORTS / Fuente: Instagram (@latininico)

Por otro lado, Luciano di Grazia, periodista de TyC SPORTS, piensa que debió haber dirigido esos clubes como Boca o Napoli: «Napoli más que Boca, pero siempre se lo ninguneó, siempre se le han cerrado las puertas».

Luciano Di Grazia, periodista de TyC Sports /Fuente: Instagram (@lucho_di_grazia)

Diez años después de dirigir a Racing de Avellaneda, y ya retirado como jugador profesional, Maradona se hizo cargo de la Selección Argentina durante el clasificatorio para la Copa del Mundo del 2010. Tras conseguir clasificarse, Maradona dejó uno de los momentos más recordados en las salas de prensa, la famosa frase “a los que no creían, con perdón de las damas, que la chupen”. Ya en el mundial, Argentina quedó primera del grupo B y eliminó en octavos a México, debiéndose enfrentar a Alemania en los cuartos. Aquel día, Argentina fue goleada por el seleccionado alemán y supuso el último partido de Maradona al frente de la selección.

Leandro Buonsante, periodista de DIRECTV SPORTS, piensa que en la selección «su gestión no fue buena en líneas generales», mientras Fabián de María cree lo siguiente: «No pudo armar del todo bien ese equipo con grandes estrellas».

Leandro Buonsante, periodista de DIRECTV SPORTS / Fuente: Instagram (@leandro_buonsante)

Tras la experiencia en la selección argentina, Maradona probó suerte en los banquillos de equipos árabes de poca relevancia futbolística, hasta que fue contratado por el Dorados de Sinaloa, de la Liga de Ascenso de México, donde tenía el objetivo de conseguir el ascenso de categoría. El equipo llegó hasta la final, donde fue derrotado por el Atlético de San Luis y privado de ascender. Ese mismo año, el argentino dejó el banquillo del equipo mexicano debido a problemas de salud. Tras unos meses, Maradona volvió a los banquillos, esta vez en Argentina, gracias a la oportunidad que le ofreció Gimnasia y Esgrima de La Plata. Sin embargo, Maradona no era realmente el técnico.

Gustavo Ortiz: «Él tenía muchos problemas de salud y por eso ningún club grande se quería hacer cargo de tener a Maradona. Lo de Gimnasia la verdad que fue muy bueno para él, porque anímicamente lo motivó».

Nicolás Biturón piensa lo siguiente: «Él necesitaba un grupo de trabajo, un cuerpo técnico, que se encarguen de lo estratégico y lo táctico y el centrarse en la motivación, inspirar al jugador”. La misma línea defiende Germán Balcarce, quien añade: “La realidad es que no estaba en condiciones físicas dirigir, obviamente no voy a discutir su sabiduría futbolística pero no me da la sensación de que los méritos u errores fueran suyos»

La decadencia: Mito vs Persona

Para muchos uno de los mayores ídolos y referentes que se puede tener, y para otros una persona cuya vida extradeportiva manchó tanto su figura que jamás podrían reconocerle como uno de los más grandes referentes de la historia de Argentina. Todas las acciones y rumores que han rondado siempre a Maradona sobre su persona han provocado una disparidad de opiniones al respecto. El hecho de que quepa la posibilidad de que gracias a sus logros futbolísticos, todas sus malas acciones personales hayan quedado eclipsadas.

Maradona en su etapa como jugador del Barcelona / Fuente: Miguel Moreno

Nicolás Biturón: «Lo que hizo Maradona como futbolista tapó muchas cosas personales, eso es así. Acá en Argentina se le perdonaron cosas que a ningún otro deportista se le hubiesen perdonado: ni Messi, ni Del Potro, ni Ginóbili, y por supuesto a ningún político».

El movimiento feminista siempre se opuso a la figura de Diego Armando Maradona tanto en su vida como después de su muerte. De hecho, muchas fueron las que decidieron no seguir con la inmensidad de homenajes que se realizaron por la leyenda argentina los días posteriores a su fallecimiento.

Paula Dapena, jugadora del Viajes InterRías FF que se negó a homenajear a Maradona / Fuente: Listín Diario

Uno de los casos más populares fue el de una jugadora de fútbol femenino, Paula Dapena, que decidió dar la espalda durante el minuto de silencio correspondiente a su partido ya que, como feminista, no podía homenajear a Maradona. Este gesto provocó diferentes opiniones de los periodistas al respecto:

«Respeto la decisión de esa jugadora porque cada uno es libre de tomar la decisión que quiera. Si a ella le surgió actuar de esa manera está en todo su derecho y tiene todos sus motivos. Hasta probablemente tenga razón. Pero tiene que entender que también es importante tener en cuenta todo lo que hizo Diego por y para el fútbol», relata Sebastián Quadrelli.

Luciano Di Grazia: «Yo creo que en los días después de la muerte de Maradona hubo gente que quiso ser más importante que la propia noticia de su fallecimiento, y lo de esa chica fue uno de esos casos».

«Fue una falta de respeto para la persona más representativa que ha dado este deporte», cuenta Nicolás Latini.

Velatorio y luto por la muerte

La despedida de Maradona, con honores de héroe nacional, en la Casa Rosada, la sede del Poder Ejecutivo de la República Argentina, tampoco estuvo exenta de polémica. Miles de personas se concentraron, desoyendo las recomendaciones contra la pandemia del COVID-19, para dar un último adiós a su ídolo, en un velatorio público, permitido por la familia. Sin embargo, la escasa duración desembocó en revueltas contra la policía para poder acceder al recinto, que acabaron siendo reprimidas.

Velatorio de Diego Armando Maradona en La Casa Rosada / Fuente: Infobae

Para Leandro Aguilera, la situación vivida en el velatorio se explica así: «Maradona representó siempre a los más desprotegidos, a los que menos tenían, siempre fue en contra el poder, del sistema, entonces creo que eso llevó a muchas personas a ese descontrol de estar presentes en el velatorio de Maradona, y se llegó a la situación que vivimos. Fue una barbarie porque nadie se cuidó, estamos en pandemia, a todos los que estaban no les importaba, no les interesaba contagiarse de coronavirus. Yo estuve en la Casa Rosada, estuve en la cobertura de la Plaza de Mayo y fue un verdadero descontrol, creo que por eso también se dio la cantidad de gente, para mí más de un millón de personas».

Germán Balcarce lo comenta de esta forma: «La despedida de Maradona fue en cierto modo tragicómica, mirándolo a distancia. Fue una vergüenza que la Casa Rosada fuera invadida por ciertos desmanes. Además, en plena pandemia amontonar gente no parecía algo aconsejable, aunque también es cierto que la gente se iba a movilizar igual, por eso digo que es tragicómico, porque la vida de Maradona fue bastante desordenada y su velatorio estuvo a tono con esa situación. Fue muy especial todo lo que sucedió».

Por último, Sebastián Quadrelli se expresó así sobre el evento, que también tuvo que cubrir: «Para hacer una despedida de ocho horas en Casa Rosada para Maradona era preferible no hacerlo, porque era obvio que esto iba a pasar, había que dejar tres o cuatro días para que toda la gente pueda ir. Me parece que fue acertada la decisión de abrir la Casa Rosada para que lo velaran ahí, pero tendría que haber sido de más días o haberse manejado de mejor manera la comunicación y avisar que los que no iban a poder entrar se podían agrupar para despedir el coche con el ataúd de Diego por diferentes sectores. Se hubiese acomodado de otra forma… pero Diego era eso, no quiero juzgar si fue una exageración, pero fue una despedida a la altura Diego, porque despertaba que la gente no se pudiera controlar».

Maradona en Boca Juniors / Fuente: AS

D.E.P.

Diego Armando Maradona

1960 – 2020