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periodismo universitario en internet

La Mujer Rural, una figura invisible

Visibilidad de la mujer en el medio rural

Mujer rural con sus caballos. Laura Castillo

  • En España, las mujeres representan el 48,8% de la población rural, y el 12% del total de mujeres del país.

  • Ellas juegan un papel crucial en la agricultura, la seguridad alimentaria y nutricional, así como en la gestión de la tierra, de los recursos naturales y las empresas rurales. 


El medio urbano debe saber qué es vivir en el medio rural y comprender que existe una compaginación entre ambos, mucho más dada la situación pandémica que se está viviendo, donde las mujeres rurales están trabajando sin importar la cantidad de horas ni la situación meteorológica. 
Las mujeres rurales tienen claro su cometido: hay que darle de comer al mundo y mantener esta sociedad sea como sea. Hablamos así, de una labor imprescindible que muchas mujeres llevan realizando desde hace años con pasión, y otras que comienzan ahora y que dejarán una importante huella en nuestra sociedad. Por ello, es necesario darles cierta visibilidad para comprender mejor cómo es la vida de estas mujeres y cuál ha sido su evolución en los últimos años.

 

 

Evolución del concepto rural

La mujer rural ha avanzado con el paso de los años y presenta grandes diferencias en la actualidad. A día de hoy, podemos afirmar que el medio rural ha evolucionado pasando de un ambiente más precario y atrasado, a otro donde la igualdad de oportunidades y el desarrollo socioeconómico, han sido conseguidos mediante esfuerzo, iniciativa y sobre todo, el importante empuje de las mujeres rurales.

El concepto de mujer rural va más allá de la imagen que existe de una mujer labrando el campo. Y aunque es cierto, que muchas de ellas trabajan en el sector primario como ganaderas o agricultoras,  muchas otras son mujeres empresarias y dueñas de sus propios negocios en el medio rural. Así nos lo cuenta Sonia Morera, mujer rural de Cachorrilla (Cáceres), trabaja en la oficina de igualdad de la Mancomunidad Rivera de Fresnedosa, y afirma que cada vez son más mujeres más que se ponen al frente de sus propios negocios en los diferentes pueblos que la forman.

Las mujeres han sido capaces de construir una amplia esfera llena de posibilidades en el ámbito rural que permite aprovechar al máximo los recursos de sus pueblos y crear riqueza, empleo y equilibrio en la balanza de género.

Visibilidad de la mujer en el medio rural

Dos mujeres rurales con sus gallinas. Irene Domínguez

Día de la mujer rural, día para celebrar

El 15 de octubre se celebra el día internacional de la mujer rural, un día que elogia el importante papel de las mujeres en el medio rural. Reconocido por la Organización de las Naciones Unidas, el día de la mujer rural, se erige como un día de reconocimiento hacia la inestimable contribución de las mujeres al desarrollo. Atendiendo a los datos que ofrece la ONU, las mujeres rurales desempeñan un papel fundamental, ya sea en la agricultura, la gestión de la tierra, la nutrición, los recursos naturales e incluso con sus propios negocios rurales.

En esta inusual situación pandémica, han estado en primera línea de batalla, incluso cuando el volumen de trabajo, en ocasiones no remunerado, aumentaba. Es por ello que este año, el día internacional de la mujer rural tiene más peso que nunca, agradeciendo así su importante labor incluso en tiempos difíciles.

 

Visibilidad de la mujer en el medio rural

Mujer rural ordeñando una vaca. Laura Castillo

Un cambio conceptual: Mujer rural antes vs. ahora

Como se ha mencionado anteriormente, los cambios son muy visibles. Actualmente, las mujeres ganan más con una jornada de trabajo más corta que lo que antes obtenían cultivando arroz, por ejemplo. Pero que actualmente la mujer rural se encuentre en un mundo distinto y cambiante en cuanto al pasado, no significa que sea fácil, ya que siempre ha estado rodeada de oportunidades y retos, pero sobretodo de dificultades.

Las experiencias de la mujer rural se basan en una economía rural cambiante, incluida su posición en las estructuras familiares y comunitarias. Estos actuales cambios en la economía rural pueden alterar tanto positiva como negativamente, ya que puede agudizar la parcialidad de género e incluso, afectar a los derechos tradicionales de la mujer respecto del uso de la tierra.

Es propio valorar la postura de la mujer rural frente a estos cambios, en los que se incluye la creciente agrupación de las labores rurales, donde una empresa adquiere el monopolio e incorpora a sus propios trabajadores. En este caso, se juntan dos factores: la creciente desaparición del trabajo rural como tal, debido al uso de máquinas y las nuevas posibilidades que ofrece el mundo actual, donde las mujeres se sienten más cómodas. Sin embargo, la parte positiva es la valoración del emprendimiento y autoempleo como una posibilidad laboral. De esta manera, las mujeres han sabido aprovechar los recursos y ahora gozan de una importante autonomía con la que anteriormente no contaban.

Es destacable ver cómo las mujeres rurales han sabido reinventarse sin depender de una figura masculina como antaño. Esta transformación viene de la mano de aquellas mujeres que son parte activa de la evolución y por ello, el motivo de celebración del día internacional de la Mujer Rural reconoce a aquellas mujeres que no tuvieron la oportunidad de desarrollarse de manera plena en sus pueblos, pero que con su voz y lucha pusieron las bases para todas las generaciones posteriores.

 

Una tradición que se estanca

En muchas familias, la tradición de trabajar en el ámbito rural viene por herencia. Sin embargo, cada vez son menos las hijas y nietas que siguen con la tradición de las mujeres rurales. La gran mayoría renuncian al trabajo rural para irse a la ciudad a buscar nuevas oportunidades de negocio. Esta migración del pueblo a la ciudad lleva sucediendo desde que comenzó la revolución industrial, pero actualmente es más común que todos los hijos nazcan con la intención de irse a vivir y estudiar a las ciudades, y en caso de volver, pocas veces es para dedicarse al medio rural. 

Las mujeres han experimentado todo tipo de rechazo en este ámbito, pues eran consideradas (y se siguen considerando en muchos aspectos) como simples ayudantes o amas de casa. Quizás es esta la razón, por la que son más mujeres que hombres, las que renuncian a continuar con la tradición familiar para buscar su propio camino alejadas de prejuicios. En el caso de Maribel y sus hermanas, el campo era la única fuente de ingresos, sus padres y abuelos siempre les inculcaron el valor y la necesidad de dedicarse a esta labor, por lo que nunca se plantearon abandonar el pueblo.

También cabe destacar el caso de Concepción, que contó que sus padres no la querían por ser mujer, ya que esperaban a un hombre que pudiese ayudar en las labores duras del campo. Sin embargo, a sus padres no les quedó otra que aceptarlo, y resultó ser una mujer que nada tenía que envidiar a los hombres: tareas como cortar leña, llevar al ganado y cosechar trigo en Cartirana, eran las que realizaba todos los días. A pesar de ello, la figura de la mujer rural terminará con ella, ya que sus hijos trabajan en la ciudad y en ningún momento tuvieron la intención de continuar con la tradición de su madre en el campo.

Visibilidad de la mujer en el medio rural

Maria Jesús Barreras en su tractor junto a su hermana. Villafranca de Ebro. 1947. Laura Castillo

Posible desaparición de la figura de mujer rural

Aunque siguen existiendo mujeres rurales en España, las futuras generaciones no parecen muy alentadoras. Las mujeres jóvenes tienen otro futuro en mente lejos de los medios rurales. En ocasiones, se puede ver cómo las mujeres retoman su labor rural cuando se jubilan en caso de tener un terreno. Existen grados y cursos de formación laboral dirigidos a trabajar en el mundo rural, pero lo cierto es que la mayoría de matriculados son hombres. 

Varias entrevistadas coinciden en que es una labor que se está perdiendo y que tampoco se ha valorado como realmente se merece. Concepción afirmó que el papel de la mujer rural únicamente fue por necesidad en un tiempo determinado, ya que durante la guerra se cerraron los colegios y todo el mundo, tanto hombres como mujeres, se vieron obligados a ir a trabajar al campo. En definitiva, fue lo que a ellos les tocó vivir, ya que no fue un trabajo que inició por decisión propia.

Actualmente, las posibilidades de continuar con la labor y tradición son pocas debido al cambio social que se ha producido, lo que desembocará, muy seguramente, en la desaparición de la figura de la mujer rural si gobierno y sociedad no actúan rápidamente.

 

AMFAR

AMFAR es la federación de mujeres y familias del ámbito rural. Su labor se divide en tres actividades principalmente: informar, formar y defender los derechos de la mujer ruralEn su labor informativa se dedica a ofrecer datos sobre las cuestiones que más preocupan sobre este asunto como puede ser el empleo, la igualdad de oportunidades o la convocatoria de ayudas y subvenciones a un sector en declive como el de la mujer rural.  Para ello trabaja directamente con la agencia Atenea, que se dedica a la Información Laboral.

Visibilidad de la mujer en el medio rural

Mujer rural con sus vacas. Laura Castillo

Uno de los pilares fundamentales de esta asociación es la formación, ya que es una de las herramientas que le otorgan libertad a la mujer, así como seguridad, confianza y autoestima. Para conseguir esto AMFAR organiza cursos, seminarios, charlas y jornadas informativas en las que participan mujeres y familias del ámbito rural. Los temas de estas sesiones se ajustan a las demandas de las asociadas, así como a los marcados por la agenda de políticas sociales, de bienestar y agrarias.

La última de las tareas a las que dedica su tiempo AMFAR, y quizás la más importante es la Defensa de los Derechos de la Mujer y Familias del Ámbito Rural. Su principal objetivo es crear una conciencia social de la participación de las mujeres en el ámbito rural, además de encargarse de proyectar una imagen real y actual de un colectivo que siempre ha estado olvidado, dejando de lado el tópico de relacionar a la mujer rural exclusivamente  con la mujer agraria. El último de los fines por los que lucha AMFAR es conseguir políticas que aseguren la igualdad en ámbitos rurales. Cada tres meses, la federación edita la revista Mujer Rural, un canal de información entre todas las asociadas. 

 

El campo, una asignatura obligatoria 

La mujer rural se presenta en la actualidad como una figura moderna, atrás queda el concepto de mujer campesina, o mujer que trabajaba para el hombre. Estas mujeres son un modelo a seguir, que con el paso de los años siguen produciendo, creando y cuidando del medio rural.

La globalización, la ignorancia, o la despoblación, son motivos que han hecho que cada día haya menos mujeres en el campo. El desconocimiento de la labor de la mujer rural, es el culpable de esa desaparición. Se debería enseñar al mundo cómo llega un brick de leche al Mercadona, ese nugget de pollo al KFC, o esos cereales a tu tazón todas las mañanas. Una forma de vida digna y dura como otras, pero desconocida y llena de tópicos. Yolanda Lavín, ganadera en Cantabria, cuenta que la labor en el campo debería ser “asignatura obligatoria desde los tres años.”

Con el campo modernizado, las máquinas, internet… la mujer rural ha avanzado con el paso del tiempo, ahora son ellas las dueñas de sus propias explotaciones. Sin embargo, es la ciudad, ese medio urbano, el que debe ser el apoyo a este  sector tan importante, no menospreciándolo e interesándose por él, ayudando a que la mujer rural no se extinga nunca.

5 Comments

  1. Me ha encantado

  2. Un trabajo muy duro y poco agradecido aunque maravilloso.

  3. Que importante la función de la mujer rural.Buen trabajo

  4. La mujer rural… Mujer luchadora y muy trabajadora en un entorno difícil
    Buen trabajo!

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