Sexualización de la mujer en los medios audiovisuales
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Según un estudio realizado por la UNESCO, en el mundo audiovisual, 3 de cada 4 mujeres han sido objeto de violencia en la red
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Las desigualdades entre hombres y mujeres no surgen de los medios televisivos pero estos proporcionan un reflejo del pensamiento social sirviendo de apoyo en el desarrollo o incentivo de muchos pensamientos que resultan nocivos
La sexualización es el valor que se le da a una persona, en este caso a las mujeres, sólo por su atractivo o comportamiento sexual. Dicha sexualización se aprecia en películas, programas de televisión, de radio, al hojear las páginas de una revista o navegar por Internet. De esta forma, el trabajo periodístico que realizan muchas profesionales en el ámbito televisivo en todo el mundo se desprestigia, simplemente por su atractivo físico según los estereotipos socialmente aceptados.
Datos sobre la sexualización
Según la UNESCO las mujeres periodistas reciben muchos más ataques en línea que sus colegas hombres. Estos acostumbran a tener un cariz sexual, centrándose en el físico o manera de vestir y obviando todo lo relacionado con su profesión. Estas amenazas interfieren en la labor periodística y tienden a silenciar las voces de las profesionales, distorsionando el cometido de los medios de comunicación, perpetrando desigualdades y amenazando a la diversidad.
Tal y como demuestran distintos informes y resoluciones de la ONU la comunidad internacional es consciente de esta problemática y reconoce la necesidad de tener en cuenta estos riesgos, pudiendo así hacerles frente. A mediados de 2021, Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO, abordó esta cuestión en su solicitud anual a los Estados Miembros, preguntando por posibles medidas a adoptar para la seguridad de las mujeres periodistas, tanto en su entorno de trabajo como online.
La representación e implicación de las mujeres en los medios de comunicación y la publicidad es desigual, discriminatoria, sexista y estereotipada, ya sea como personajes, protagonistas, voces expertas o profesionales. Es por eso que los medios tienen la posibilidad y la responsabilidad de contribuir a generar valores y referentes igualitarios e inclusivos.
“¿Dejarán algún día de sexualizarnos?”
A raíz de ver estas situaciones, decidimos ponernos en contacto con Noor Ben Yessef, periodista que entró de becaria en atresmedia en el año 2019, comenzando su carrera profesional en el programa “Espejo Público”. Actualmente trabaja en el noticiario matutino de Antena 3 noticias y hace pocos días, decidió subir a una red social los muchos comentarios sexistas que recibía a diario, reivindicando la libertad de decidir cómo vestir y el cansancio que supone lidiar con este tipo de situaciones innecesarias.
En la conversación que tuvimos en profundidad con ella nos dijo: “La mujer da igual la valía o los conocimientos que tenga que siempre va a ser punto a destacar su físico, y ese es el principal problema, porque a los hombres no se les cuestiona en su profesión por el físico”.
Por ellos, decidimos también entrevistar al periodista y actor Sergio Colón que ha sabido percibir el problema de la sexualización de la mujer en los medios audiovisuales que le llevó a realizar documentales a lo largo de su trayectoria profesional sobre el empoderamiento de la mujer
Casos conocidos
“¿Cómo te llamas, guapa?”, le dice un aficionado de “La Roja” a la periodista de Mediaset, María Gómez, cuando esta le preguntaba su opinión sobre la derrota de la selección española. A lo que la reportera responde de inmediato: “María, pero lo de guapa no hace falta. María, periodista”.
Otro caso es el de Julieth González Theran, quien fue asaltada por un individuo que la besó y tocó un pecho por sorpresa. Los hechos ocurrieron en el Mundial de Rusia 2018, la misma ciudad donde Colombia debía enfrentarse a Japón.
Independientemente del medio de comunicación, las mujeres por lo general suelen mostrarse delgadas, altas y maquilladas. La representación e implicación de las mujeres en los medios de comunicación y la publicidad es desigual, discriminatoria, sexista y estereotipada, ya sea como personajes, protagonistas, voces expertas o profesionales
Estos acostumbran a tener un cariz sexual, centrándose en el físico o manera de vestir y obviando todo lo relacionado con su profesión. Estas amenazas interfieren en la labor periodística y tienden a silenciar las voces de las profesionales, distorsionando el cometido de los medios de comunicación, perpetrando desigualdades y amenazando a la diversidad.
Tal y como demuestran distintos informes y resoluciones de la ONU la comunidad internacional es consciente de esta problemática y reconoce la necesidad de tener en cuenta estos riesgos, pudiendo así hacerles frente. A mediados de 2021, Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO, abordó esta cuestión en su solicitud anual a los Estados Miembros, preguntando por posibles medidas a adoptar para la seguridad de las mujeres periodistas, tanto en su entorno de trabajo como online.