Los usos buenos y malos de la IA. Deepfakes que resucitan o estafan

Deepfake: técnica audiovisual que imita voz e imagen

• La IA tiene pocos años, pero mucha evolución

• Las herramientas que brinda pueden usarse tanto para bien como para mal

La IA es una tecnología que está dando mucho que hablar estos últimos años, tanto para bien como para mal. La cantidad de herramientas que da es prácticamente ilimitada y crece cada día porque la máquina aprende. Se le pueden dar tanto buenos usos como malos. En este reportaje te contamos primero un poco de la historia del desarrollo de la IA y después hablaremos de sus buenos y malos usos.

Historia de la IA

El comienzo de la Inteligencia Artificial (IA) se remonta a la antigüedad, pero su gran desarrollo comenzó en el siglo XX. En la década de los 40 y 50, Warren McCulloch y Alan Turing desarrollaron la “máquina universal” y Warren trabajó en diferentes modelos de redes neuronales. Por otra parte, en la década de los 50 se realizaron los primeros experimentos con programas de Inteligencia Artificial.

Máquina Universal de Alan Turing

Fue John McCarthy quien acuñó el término “Inteligencia Artificial“. Más tarde en los 60 y 70 se fueron desarrollando sistemas de IA basados en reglas y crearon los primeros «programas de chat» como puede ser ELIZA. También en el procesamiento de lenguaje natural se realizaron numerosos avances. Si nos vamos a la década de los 80 y 90, la IA se aplicó en campos como las finanzas o la medicina y nacieron sistemas de aprendizaje automático.

Imagen de ELIZA, el primer chatbot

A partir la década de los 2000, se produjo un gran auge en la Inteligencia Artificial con el desarrollo de los algoritmos que impulsaron avances en los ordenadores, procesamiento de lenguaje. Actualmente se utiliza la IA en una gran cantidad de aplicaciones. En los vehículos autónomos los avances que ha habido son significativos. Un ejemplo es la conducción autónoma por parte del coche, donde ya hay empresas que ya han desarrollado este sistema como Ford o Tesla. Aparecen también los asistentes virtuales como puede ser Alexa o Siri, hasta sistemas de recomendación en las redes sociales. En el campo de la medicina, se han ido desarrollando chats virtuales para la atención médica y la IA se está utilizando para la investigación médica. No debemos olvidar que en el campo de la educación, se ha desarrollado plataformas en línea para enfocar la educación más personalizada. El desarrollo ha sido un proceso constante y evolutivo con el objetivo de copiar la inteligencia humana en las máquinas.

Un desarrollo al servicio de humanos que deciden si darle un buen o un mal uso. Aquí veremos algunos ejemplos de los diferentes usos que tiene esta tecnología en auge.

Los malos usos

En 2023 las noticias sobre los delitos cometidos con herramientas de IA han causado un gran revuelo, sobre todo porque la intimidad y la imagen de muchos menores españoles han sido transgredidas. La noticia que hace boom y pone el foco en la capacidad de hacer el mal de esta tecnología es la de los falsos desnudos de menores en Extremadura generados por IA. Son al menos treinta menores las que se han visto afectadas por lo que seguramente empezó como una «gamberrada» de sus compañeros de clase. Así es, un menor puede hacer uso de esta tecnología desde su propio teléfono con apps gratuitas como «DeepNude.org», «PixAI.Art» o la considerada mejor app de desnudos por el medio AItoolMall, «Nudify» (esta es de pago pero consigue los resultados más realistas).

Dibujo estilo anime creado por PixAI Art

Una vez extendida la noticia, no ha tardado en saltar la alarma sobre los otros posibles malos usos que se le pueda estar dando a la inteligencia artificial. Artículos de estafas de secuestro con voces o incluso vídeos de familiares generados por IA, pasaron desapercibidos hace un tiempo pero ahora reciben miles de visitas. Y aquí ya no son niños jugando con una aplicación del móvil. Los responsables de este tipo de estafas son adultos profesionales con bastante conocimiento de informática con los que engañar de mil maneras. Desde mandar un mensaje de texto con un enlace corrupto después de esa llamada con el supuesto familiar, hasta convencer durante la llamada de dar datos específicos usando esa voz falsa. Por supuesto se necesita que antes haya un registro de una voz para poder imitarla, pero ¿quién no ha hablado a cámara para sus redes sociales hoy en día? ¿O ha subido fotos de a cuerpo entero? Con eso, la IA puede trabajar en una reconstrucción digital. Ya ni hablemos de lo bien que se puede copiar la voz y la cara de las celebridades, con cientos de registros audiovisuales fáciles de encontrar en Internet.

Hace poco se hizo un video de Zelenski rindiéndose ante los rusos y pidiendo a los ucranianos rendirse. La técnica que se utilizó es conocida como deepfake y consiste en mezclar videos reales con elementos digitales.

En este caso se usó un vídeo del presidente ucraniano hablando y se modificó el audio de su discurso y su cara para que pronunciase otras palabras. No es del todo realista y se nota desde el principio que la cara tiene un color distinto al cuerpo, los gestos no son extraños y la voz no se escucha natural. Y se puede apreciar claramente porque es un vídeo en movimiento y en el que se ve al protagonista de frente varios minutos. Pero hay deepfakes que sí hacen dudar a la gente de su veracidad y que afectan a la reputación de los afectados. Son los deepfake pornográficos. Afecta sobre todo a mujeres. Algunos ejemplos son las actrices Gal Gadot, Jennifer Aniston o la activista climáticas Greta Thunberg.

Deepfake de Gal Gadot, actriz de Hollywood

A las celebridades masculinas les hacen otro tipo de deepfake. Hay una cuenta en Tik Tok llamada deeptomcruise  en la que un imitador consigue parecer un Tom Cruise real con ayuda de este efecto digital.

Este caso en particular tuvo mucho eco en la prensa estadounidense, que planteó el debate de si los famosos debían tener cuentas verificadas en todas las redes sociales para evitar futuras suplantaciones. Los gestos y la voz sorprenden. Cada vez se genera más la duda sobre si el propio actor ha participado en alguno de estos vídeos.

En el propio cine se han hecho milagros de este tipo rejuveneciendo o incluso resucitando actores. Ahora veremos que no todo lo relacionado con la IA es malo.

Los buenos usos

Arnold Schwarzenegger y Will Smith se han enfrentado a sus versiones más jóvenes, revivieron a Carrie Fisher como Leia en la última trilogía de Star Wars e incluyeron a Christopher Reeve como Superman en la película de Flash. Como volver a actores y al cine es un poco más de lo mismo que los casos anteriores, vayamos al mundo de la empresa.

¿Qué otros usos profesionales tiene la IA aparte de los mencionados? En esta entrevista, vas a poder descubrirlo.

Está claro que esta tecnología ha venido para quedarse, tanto para bien como para mal. Sigue avanzando y aprovechar sus funciones como sociedad dependerá del uso que se le dé. También tendrá que regularse de alguna manera, proceso, que en países como EEUU, ya está en marcha. Hasta entonces solo queda sorprendernos cada día con su avance. Como si de un hijo se tratase, la Inteligencia Artificial poco a poco va siendo más parecida e incluso más capaz que la inteligencia humana.

Aquí te dejamos una galería con titulares que corresponden a las noticias que se han tratado en este reportaje:

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