Ludopatía, del bar a Internet
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El juego online se ha multiplicado por cuatro en los últimos seis años en España
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Las apuestas online movieron 4.251,03€ millones en el tercer trimestre de 2018
El ocio, el juego por placer u otras actividades con fines monetarios han estado presentes en casi todas las culturas desde hace miles de años. ¿Sabrías identificar a un ludópata? ¿Conoces la legislación y la evolución del juego? Mediante una ardua investigación y con testimonios de expertos e incluso de un mismo ludópata, intentaremos resolver estas dudas.
En el año 1980, la ludopatía fue reconocida oficialmente cuando la Sociedad Americana de Psicología (APA) lo incluye por primera vez como trastorno en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, en su tercera edición (DSM-III).
Según la Organización Mundial De La Salud (OMS), el juego patológico se define como un trastorno caracterizado por la presencia de frecuentes y reiterados episodios de participación en juegos de apuestas, los cuales dominan la vida de la persona enferma en perjuicio de sus valores y obligaciones sociales, laborales, materiales y familiares. Esta conducta es progresiva y con frecuencia va incrementando a pesar de las consecuencias sociales a las que se enfrenta.
«Tal es su deseo de jugar que engañan a miembros de la familia, terapeutas u otras personas para ocultar el grado de implicación con el juego, o incluso cometen actos ilegales, como falsificación, fraude, robo, o abuso de confianza, para financiarse el juego» nos cuenta un psicólogo de la Clínica Universitaria de Psicología.
Con el desarrollo de las nuevas tecnologías, parece que poco a poco la ludopatía está en aumento. Apuesta, apuesta, apuesta. No es solo un mensaje subliminal sino también una campaña usada por una casa de apuestas para incitar al juego. Con más de 385 centros de apuestas en Madrid (a octubre de 2018) parece que la ludopatía seguirá formando parte de nuestra vida. ¿Cómo empezó todo?
Las tragaperras
Su historia comienza en 1897 en San Francisco. Su creador, Charles Frey, llamó a la primera máquina tragamonedas Liberty Bell. Pero Frey no patentó su invento, lo que provocó que muchos fabricantes de EE.UU. creasen sus propias máquinas con ligeras modificaciones.
Las máquinas tragamonedas llegaron a España en las primeras décadas del S.XX. Pero debido a su prohibición durante la dictadura de Primo de Rivera, muchos de los casinos donde se encontraban quebraron. Sin embargo durante la 2ª República, estos locales se utilizaron como centros culturales. Ya con la imposición de la dictadura franquista, los juegos de azar volvieron a ser prohibidos ya que, según la moral, promovían el vicio, y fue así como sólo estaban permitidos el cupón de la ONCE, la Lotería Nacional, las apuestas hípicas y las quinielas de fútbol. Pero si existían salones de juego con ping pong, billares y futbolines.
«Los futbolines y billares eran los juegos más populares de los setenta», nos cuenta Ignacio. Su salón de arcade no fue de los primeros, pero sí fue popular entre los chavales del barrio de Opañel. «En los ochenta empezaron a llegar las máquinas de videojuegos, como el Tetris o el Street Fighter. Eran máquinas caras pero muy rentables».
Fue en 1981, durante la Transición, cuando se legalizaron las tragamonedas. El gobierno permitió que no solo se pudiera instalar las máquinas en los casinos y salas de juego, sino también en cafeterías y bares. En pocos años, se convirtió en el juego de azar más de España.
«El precio de las partidas de las máquinas de videojuegos empezó a subir, y la gente dejó de jugar tanto», recuerda Ignacio con nostalgia. «Para poder sobrevivir, las reemplacé por máquinas tragaperras porque ya eran legales. Eran carísimas, y la licencia también salía por un pico. Pero era lo que daba dinero». Como curiosidad, en nuestro país se llaman “tragaperras” porque era la forma coloquial de llamar a las antiguas pesetas.
Pero: ¿Cómo podemos identificar a un ludópata? ¿Cómo diferenciarlo de alguien que juega solo por diversión? A continuación te damos un par de señales que te pueden ayudar a identificar si padecer ludopatía o si conoces a alguien que la padezca. El límite entre un amante y un adicto tiene una línea muy delgada y de no ser percibidos a tiempo los síntomas de un ludópata, pueden generarse consecuencias graves para quien tiene este padecimiento y para su entorno laboral y profesional.
El perfil medio del ludópata es un hombre de clase media con formación entre los 18 y los 30 años sin embargo no todo se reduce a este género o a este rango de edad, la ludopatía no perdona si eres hombre o mujer, si eres joven o ya estás entrado en años. Este jugador patológico se define como aquella persona que tiene una dependencia excesiva al juego que lo lleva a una alteración progresiva de su comportamiento. Existe pues, en el ludópata una necesidad subjetiva de jugar para recuperar lo perdido y superar el fracaso continuo en el intento de resistir los impulsos de jugar. Los pensamientos distorsionados o irracionales suelen ser frecuentes, tales como el optimismo irracional y la superstición.
Cinco claras señales de un perfil ludópata:
- Presentan una excesiva preocupación por el juego, como, por ejemplo, una preocupación por revivir experiencias anteriores de juego o pensar formas de conseguir el dinero con el que jugar.
- Jugar con grandes cantidades de dinero para conseguir el grado de excitación deseado.
- Fracaso repetido debido a los continuos esfuerzos por controlar, interrumpir o detener el juego, a lo que se le suma un estado de inquietud y de irritabilidad cuando intentan interrumpir el juego.
- Utilizan el juego como una manera de escapar de los problemas o aliviar sentimiento de desesperanza, culpa, ansiedad o depresión y a pesar de que han perdido dinero en el juego, vuelven otro día para intentar recuperarlo.
- Tal es su deseo de jugar que engañan a miembros de la familia, terapeutas u otras personas para ocultar el grado de implicación con el juego, o incluso cometen actos ilegales, como falsificación, fraude, robo, o abuso de confianza, para financiarse el juego.
La Federación española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR) menciona que el juego se considera patológico cuando la persona piensa, vive y actúa en función del mismo, dejando de lado o en un segundo plano otros objetivos y necesidades. Aunque la ludopatía sea una adicción que no tiene como referencia material una sustancia, el ludópata presenta los mismos rasgos que un adicto.
Pudimos acercarnos a esta realidad al realizando una entrevista a un hombre que padece esta enfermedad, y que por razones de privacidad y por petición propia del entrevistado decidimos cambiar su nombre y su voz. José (así le llamaremos), nos explica su experiencia. Cree que su adicción podría deberse a la influencia que generó su padre en él, puesto que en la rutina de este siempre estaba irse al bar más cercano y «echar unos cuántos duros». José teniendo unos 25 años, se enfrenta a la muerte de su padre y a circunstancias personales y laborales de las cuales huía jugando. Primero como su padre, de vez en cuando, y luego a diario y a todas horas cuando descubrió que podía hacerlo desde la comodidad de su móvil.
Del bar a internet
Para nadie es un secreto que Internet ha llegado a nuestra era no solo para quedarse, sino para transformar todo aquello que conocemos a su antojo: nuestros tiempos y horarios, nuestra forma de comportarnos y de percibir el mundo al igual que todas las prácticas a nuestro alrededor. Por eso nuestra forma de entretenimiento no iba a ser menos. De hecho casi desde sus inicios y de este modo en aumento se han ido concibiendo en el seno del inmenso y profundo mundo de Internet y las nuevas tecnologías, todo tipo de métodos y formas de distracción, entretenimiento y juegos que nos permiten la posibilidad de inhibirnos de la estresante realidad que nos envuelve. La inmediatez apodera nuestros días, y con ello todo lo positivo y negativo que esto acarrea. Pero de esto se ha sabido aprovechar la industria del juego en pro, como no, de sus beneficios.
Inmediatez, negocio y juego redondo
Inmediatez es la proximidad en el tiempo y en el espacio. Con esta simple definición también podríamos definir lo principales conceptos que traen consigo el Internet. Esto trae consigo todo lo bueno y lo malo. ¿Cómo afecta este fenómeno a la ludopatía?
Desde que en 2011 se legalizara el juego online en España se han sabido aprovechar las facultades de Internet que no solo es rápido sino que es extensible, a casi cualquier lugar del mundo. En pocas palabras el caldo de cultivo perfecto para ojos con el símbolo del dinero tatuado en sus retinas.
Un empresario que, por ejemplo, se haya dedicado a vender los naipes o el póker por casinos, haciendo contactos, construyendo una cartera de clientes que inviertan su negocio, ahora se pueden ahorrar toda esa cadena y llegar directamente al consumidor, evitando la repartición de dividendos. Contaría solo con un equipo de informáticos y desarrolladores que les crean cualquier tipo de plataforma a su antojo. Dinero que ahorran de un lado e invierten en otro, en la publicidad.
Grandes celebridades y figuras como deportistas o actrices o actores de talla mundial son el principal ingrediente de este tipo de anuncios, prometiéndonos una vida llena de alegrías, lujos y amigos si logramos hacer la apuesta o la jugada correcta. Podemos comenzar a hablar de los siguientes escalones en descenso de esa cadena y aquí llegamos al ciudadano de pie. A una persona como usted o yo que sin importar nuestro nivel económico, cultural, sexo o edad, somos igual de vulnerables a caer en el erótico vicio del juego con la esperanzadora utopía de una vida llena de riqueza y fortuna.
De hecho, el pasado 21 de marzo, la agencia EFE informaba que la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) pedían al ejecutivo de Pedro Sánchez la prohibición de publicidad de juegos de apuestas y juegos online alegando que «El Gobierno debe cumplir el compromiso de aprobar una regulación de la publicidad del juego de azar y apuesta en línea de ámbito estatal similar a la de los productos del tabaco tal y como se recoge en los presupuestos presentados para el 2019».
Víctimas de la evolución
Hasta hace solo unos poco años, y antes de que se legalizara el juego en línea, las apuestas estaban limitadas a lugares físicos: casinos, bingos, casas de apuestas o algún que otro bar. Todo en un círculo adulto. Pero ahora, con la invisibilidad que nos puede dar Internet, cualquiera con solo los datos de una tarjeta de crédito puede jugar. Y de esto se están aprovechando los menores, disfrazados de falsa adultez. Desde temprana edad ya están inmersos y controlan lo que Internet mueve y que detrás de una pantalla exploran lo que esté a su antojo.
Álvaro Bilbao, neuropsicólogo, especializado en el cerebro de los más pequeños y autor del blog, El cerebro del niño indica, en una entrevista concedida a Eldiario.es que «cuanto más pequeño es el niño más sensible es a este tipo de estímulos, que son muy adictivos incluso para adultos».
Bilbao explica que este es otro de los secretos de que sean tan adictivos, ya que hace que «el cerebro se vuelva un poco loco. Busca de manera ansiosa una estrategia o un sistema que permita volver a conseguir el premio. Pero no existe, la única manera de lograr el estímulo es jugar, jugar, jugar y jugar». Además que es fácil que hoy día un menor de edad cuente con una tarjeta de crédito bien a su nombre o que se sepa los datos de sus padres. Esos votos de confianza en ocasiones se transforman en pesadilla cuando a pronta edad descubren el mundo del azar y la apuesta. De hecho, está demostrado que las personas que padecen ludopatía empiezan a manifestar síntomas o a padecerla a edades tempranas, y que esta edad va cada vez más en descenso.
Consejos de un experto
En nuestra consulta a El Programa de Atención Integral a Adolescentes y Jóvenes de la Comunidad de Madrid Salud y a nuestro experto en psicología se proponen las siguientes medidas para la prevención de esta problemática que va en aumento.
- Intentar mantenernos actualizados en temas de tecnología y juegos: se debe conocer, observar y supervisar todo lo relacionado con estos temas: qué intereses existen, qué webs visitan, qué aplicaciones utilizan…. En resumen, estar informado de los intereses y aficiones, de manera que se pueda hablar y actuar si se detectan riesgos.
- Dar ejemplo desde la familia con un uso adecuado de los juegos de azar más tradicionales (loterías, cupones, etc.).
- Fomentar la “cultura el esfuerzo” en contraposición a la “cultura del pelotazo”: se recompensa, no solo los buenos resultados, también la dedicación, el compromiso con la tarea, el tiempo y esfuerzo invertido en alcanzar los objetivos, los éxitos intermedios y transformando los fracasos en retos a superar.
- Ayudar a gestionar el dinero: que comprendan el valor de las cosas que disfrutan, ayudar a establecer prioridades, ahorrar y planificar gastos a corto-medio y largo plazo. Es importante que se conozcan los productos financieros: los intereses, los plazos, las condiciones… para que no existan engaños con grandes ofertas de dinero fácil.
- Proponerles e incluirlos en otras actividades de ocio que no incluyan pantallas: a menudo el móvil o el ordenador es la opción más fácil para el aburrimiento, en esto debemos ser creativos e investigar sus gustos: música, viajes, actividades al aire libre, deportes, exposiciones… y trabajar la responsabilidad implicándoles en las tareas de casa.
- Fomentar una actitud crítica ante el consumismo y la publicidad: la adolescencia y juventud son los momentos donde más aumenta la preocupación por la imagen y, en ocasiones, su autoestima puede estar más basada en si tienen más o menos cosas (ropa, tecnología, imagen de éxito, etc.). Es necesario hacerles conscientes de los engaños e intereses que hay detrás de la publicidad, que cada vez es más agresiva y dirigida especialmente a la población joven.
- Favorecer el desarrollo y la maduración personal, como principal factor de protección y medida preventiva.
Si se tiene sospecha de que alguien padece ludopatía, puede ir a un profesional o acceder a los servicios que le ofrecen las asociaciones especializadas en ludopatía. Por ejemplo, la Asociación para la Prevención y Ayuda a la Ludopatía. Los recursos que ofrecen son:
- Grupos de autoayuda: grupos semanales en distintos horarios (mañana y tarde) para facilitar la asistencia del jugador y sus familiares. Asistidos por un jugador rehabilitado y por un psicólogo profesional, los participantes comparten sus experiencias y problemas relacionados con el juego.
- Atención psicológica individualizada: un equipo de profesionales colegiados con amplia formación y experiencia en el abordaje de las adicciones. Facilitan de forma individualizada la ayuda psicoterapéutica necesaria para la rehabilitación de sus asociados y sus acompañantes.
- Grupo de terapia para familiares: no sólo el jugador sufre las consecuencias del juego patológico. También ofrecen una atención especializada a todos aquellos miembros del sistema familiar o del entorno más cercano del jugador. Al igual que los grupos de autoayuda, las sesiones son asistidas por un profesional y un voluntario.
También tienen otros talleres orientados a problemas específicos relacionados con la problemática del juego de azar:
- Taller de impulsividad y habilidades sociales: dirigido a todos aquellos asociados que deseen mejorar su autocontrol, habilidades de comunicación, manejo de la agresividad, etc.
- Taller de relaciones de pareja: abierto a todos los asociados interesados en mejorar sus relaciones de pareja y familiares.
- Taller para voluntarios: para conseguir una mejor atención, se ofrece cursos de formación a los jugadores rehabilitados que deseen colaborar con la asociación.
Por otro lado, desde nuestra universidad, también podemos hacer frente a este problema, ya que en la Clínica Universitaria de Psicología, se ofrecen tratamientos basados en la evidencia para esta problemática. No solo atendiendo a la población universitaria, sino también a cualquier persona de la población en general que necesite ayuda. Se puede contactar con ellos a través del teléfono 913942614.
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- variacion XXI | La ludopatía no es un juego - […] por alto y que, además, gracias a internet existen infinidad de portales donde se pueden realizar apuestas de manera…
Un artículo fundamental para entender la evolución de las casas de apuestas.