A puerta fría
Distribuidoras españolas
Desde el inicio de la crisis, bajo una situación absolutamente precaria respecto a lo que empleo se refiere en nuestro país, cada vez son mas las personas que a la desesperada se ven obligadas a trabajar bajo unas condiciones laborables deplorables. Sin embargo, lo que para muchos supuso una época de crisis, para otros significo una etapa de nuevas oportunidades . Tras la liberación del mercado energético, los gigantes de la energía en España pasaron de ser empresas publicas a ser empresas privadas lo que supuso la creación de millones de puestos de empleo y la apertura de nuevas empresas al mercado. Desde su inicio en el 2007 hasta el día hoy son casi 200 las empresas que constituyen este mercado. Tratándose de un bien de primera necesidad, y a pesar de existir cada vez mas competencia gracias a la liberalización del mercado, siguen siendo cinco las compañías que se reparten a día de hoy el pastel. Actualmente estas empresas ceden sus derechos de explotación a terceras empresas que bajo una serie de condiciones, les autorizan a comercializar su producto, consiguiendo altísimos beneficios.
Reparto distribucion electrica nacional
LOS FRAUDES EN LAS OFERTAS DE ELECTRICIDAD EN EL MERCADO LIBRE CONTINÚAN CRECIENDO
Mediante campañas publicitarias engañosas y visitas de comerciales a puerta fría, las grandes eléctricas anuncian descuentos que en realidad hinchan las facturas de los usuarios. También continúan las quejas fruto de errores en las lecturas de los contadores o por no haberse producido durante largos periodos, aplicando posteriormente facturas desproporcionadas. Las compañías eléctricas buscan clientes vía teléfono y casa por casa, ofreciendo importantes descuentos sobre los precios regulados, a los que aún siguen acogidos casi 16 millones de hogares en España.
Nuevos contadores digitales
La principal acción comercial de estas empresas del sector energético es la venta casa por casa conocida mas popularmente por “puerta fría”. Actualmente son millones de personas en nuestro país las que trabajan realizando esta practica comercial dentro del sector energético, contratados en su mayoría por las cinco distribuidoras nacionales. Por un motivo u otro, nos encontramos ante una situación insostenible tanto para sus trabajadores, como para sus clientes. El trabajador; por una parte sometido a una excesiva competencia, sin ninguna clase de regulación, una oferta comercial que en muchos de los casos no supone ninguna mejora económica para los usuarios, contratos precarios, que en la mayoría de los casos son de régimen autónomo, sin ninguna clase de remuneración fija, ni cobertura medica. El usuario o cliente; totalmente desprotegido en un mercado sin ningún tipo de transparencia, donde las grandes empresas de la energía no paran de obtener beneficios millonarios a su costa. Este tipo de venta, no deja de ser una practica comercial que produce cada día mas inseguridad y desconfianza por parte del usuario.La caza y captura a toda costa del cliente en el sector eléctrico ha provocado que en año 2014 se hayan alcanzado niveles históricos de denuncias de consumidores contra las compañías, según informa la OCU. La mala praxis y la falta de valores por parte de ciertos trabajadores han provocado innumerables olas de estafas de todo tipo dentro de este sector. Esto sumado a la falta de información por parte de usuarios y trabajadores y la falta de profesionalidad de algunos trabajadores, ha generado una absoluta desconfianza a la hora de tomar la decisión de cambiar de compañía eléctrica.
Factura de electricidad Endesa
Esta desconfianza acaba convirtiéndose en la principal dificultad e inconveniente para que miles de trabajadores pueden desempeñar su trabajo, sometiéndose en la mayoría de los casos a absolutas faltas de respeto y educación por parte de los usuarios. Dificultad a la que tenemos que añadir la falta de transparencia por parte de estas grandes compañías, tanto a lo que a formación comercial se refiere para sus empleados, como a la falta de información en manos del consumidor, que ante un total desconocimiento sobre el merado, se niegan a realizar cambios sobre sus compañías de energía. Estas tendencias no solo han llevado al consumidor a desconfiar de cualquier oferta comercial que forme parte del mercado energético nacional, sino también a desconfiar absolutamente de cualquier vendedor a puerta fría que diga representar a cualquiera de estas grandes compañías energéticas, haciendo del trabajo de estas personas una tarea prácticamente imposible de desempeñar.
Mientras los directivos de las grandes empresas que habéis mencionado se enriquecen, hay tras la puerta de los ciudadanos algo más que desconfianza hacia el vendedor, gente que no puede hacerle frente a las facturas. Se trata de ese problema que se ha ido haciendo cada vez mayor durante la crisis, y no sólo en estas empresas. Es el beneficio de la minoría rica, frente a las necesidades básicas de todos los demás. Pero a ellos, los “ricachones”, crecer les da más eficiencia y poder para reducir cotes, que no aprovechan para otra cosa que no sea “querer más”. La codicia les envuelve, y los pobres que se quedan al otro lado de su puerta, ya se buscarán la vida. No nos olvidemos que la culpa no es de los trabajadores de “abajo”, ellos acatan unas normas para poder pagar sus facturas, ¡bastante tienen con trabajar para ellos!. La falta de valores en grandes empresarios, en mi opinión, no tiene solución si ya han allcanzado la cima.
Excelente juicio analítico de esta desfachatez! un 10!!