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periodismo universitario en internet

Los Trastornos de la Conducta Alimentaria en la era digital

Cuando la comida es tu peor enemigo

Anorexia nerviosa/Raúl Jiménez Vicioso

  • Los TCA más comunes son la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa, pero existen muchos más

  • La población más afectada por este tipo de trastornos son adolescentes y jóvenes menores de veinticinco años

En la era digital los jóvenes viven claramente influenciados por las redes sociales e Internet, con la llegada de la pandemia se han descubierto las carencias existentes en la salud mental de uno de los sectores más vulnerables de la sociedad. Tras meses de confinamiento, donde las interacciones sociales y la libertad de movimiento se han visto drásticamente reducidas,  se ha producido un grave aumento y empeoramiento de las enfermedades mentales, una de las más frecuentes son los Trastornos de la Conducta Alimentaria.

Con 12 años, María comenzó a preocuparse por la comida que consumía. Primero, empezó a preocuparse por los ingredientes de los productos que compraba, eliminó los ultraprocesados de su dieta. Después, fue midiendo las cantidades de cada alimento que ingería, y el valor nutricional de los mismos. Dejó de comer hidratos de carbono, dulces o cualquier comida que ella considerara que le iba a engordar. En verano de 2018 fue ingresada en el hospital por primera vez. María padecía una enfermedad mental o Trastorno de la Conducta Alimentaria conocido como anorexia nerviosa.

 

Un diagnóstico lento

Los TCA son un conjunto de alteraciones graves relacionadas con la ingesta de comida, la autopercepción y la distorsión de la imagen corporal y asociadas a determinadas anomalías psicológicas.

En muchos casos es una forma de enfrentar situaciones emocionales complejas que comienza a exteriorizarse con una sintomatología ansiosa-depresiva. Los más comunes son la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y el trastorno por atracón, pero existen muchos más.

«El diagnóstico de un TCA siempre es tardío y complejo. Fundamentalmente porque los pacientes no tienen conciencia de enfermedad y no consultan por sí mismos», explica Elena Díaz, residente de Medicina Familiar y Comunitaria del Hospital Ramón y Cajal. Muchos de los diagnósticos de este tipo de trastornos se producen en consultas por otras causas provocadas indirectamente por la enfermedad (amenorrea, dificultad para perder peso…). También es frecuente que la familia o el entorno cercano del paciente acuda a una consulta médica porque visualizan el problema. En muy pocos casos es el propio paciente afectado el que crea conciencia del problema. 

 

 

Tanto los pacientes con bulimia como el trastorno por atracón se encuentran en normopeso, sobrepeso u obesidad y en ambos casos padecen atracones. En el caso de la bulimia los atracones se acompañan de vómitos u otras conductas compensatorias para paliar el aumento de peso que se ha producido por el atracón. Por otro lado, en el trastorno por atracón no hay compensación, por eso estos pacientes siempre van a tener obesidad o sobrepeso. Los pacientes con anorexia siempre sufren una pérdida importante de peso a través de una restricción importante de las comidas. 

Este tipo de enfermedades se pueden detectar a través de factores como la pérdida o aumento de peso en algunos casos, cambios de carácter, aislamiento social, irritabilidad… «El paciente se recubre de un escudo protector para que se descubra su trastorno. Muchas veces recurren a justificaciones como que ‘les duele el estómago’ o ‘ya han comido fuera’ para evadir comidas en grupo o familiares», explica Pilar López García, psiquiatra y profesora de la Universidad Autónoma de Madrid.

La población más afectada por este tipo de trastornos son adolescentes y jóvenes menores de veinticinco años, esta franja de población no es frecuentadora de los centros de salud ni de otro recurso sanitario, lo que dificulta la detección de la enfermedad. Los Trastornos de la Conducta Alimentaria se dictaminan mediante un diagnóstico de exclusión, es decir, siempre hay que descartar primero que los síntomas que presenta el paciente no sean debidos a una causa orgánica. Finalmente, todos los pacientes que se diagnostiquen de TCA se deben derivar a salud mental porque el abordaje es personalizado y multidisciplinar. «El papel del psiquiatra es crucial porque son trastornos mentales, aunque el abordaje es multidisciplinario y tienen que intervenir tanto nutricionistas y psicólogos como médicos generales o pediatras, la psiquiatría es la pieza clave que debería de coordinar a todos los especialistas implicados», añade la Doctora López.

 

Largas listas de espera tras la pandemia

El verano de 2020 María estaba en un proceso de recuperación del trastorno de anorexia que padecía desde los 12 años, el deporte al aire libre era una parte importante de su vida. Al ver que no iba poder salir a hacer nada acordó con su nutricionista reducir las calorías de su dieta y aumentar el tiempo que dedicaba a hacer deporte. Esto hizo que tuviera que volver a ser ingresada de urgencia. Fue ella misma la que solicitó ingresar en una unidad especializada en TCA, «el confinamiento por poco me mata, tuve que ingresar, mi vida corría peligro, apenas me latía el corazón». Sin embargo, todo este proceso se vio paralizado durante el confinamiento domiciliario que tuvo lugar en España entre marzo y junio a raíz de la llegada del COVID-19 a nuestro país, no solo empeoraron muchos de los pacientes ya diagnosticados, sino que también muchas personas comenzaron a exteriorizar síntomas nuevos compatibles con un TCA.

 

 

En septiembre del pasado año, el número de personas que solicitaron ayuda psicológica relacionada con Trastornos de la Conducta Alimentaria se incrementó en un alto porcentaje, según datos de la Asociación en Defensa de la Atención a la Anorexia Nerviosa y Bulimia (ADANER). «Pasé la cuarentena con mi familia e intenté llevar una dieta equilibrada y hacer ejercicio, esto hizo que poco a poco me obsesionara con mi peso. Después del confinamiento entré en una etapa en la que me provocaba el vómito», relata Marta Armendáriz, paciente con diagnóstico de bulimia nerviosa. En su caso, el confinamiento fue un periodo donde comer comida saludable y hacer deporte era algo casi «obligado» por el ambiente que se había creado en redes sociales. Cuando no pudo mantener este estilo de vida fue cuando su enfermedad se descontroló. Además, tuvo que acudir a una psicóloga privada ya que el servicio público de salud mental iba a tardar meses en atenderla.

María y Marta son dos casos de pacientes con TCA agravado por el encierro domiciliario. No obstante, la psicóloga especializada en TCA Vicky Ferrándiz apunta que también ha detectado otro tipo de casos en los que el confinamiento se ha convertido en un impulso positivo para adoptar nuevos hábitos saludables. Este tipo de pacientes han encontrado un medio seguro en el confinamiento, y han podido dedicar un tiempo al autocuidado que fuera de la pandemia no hubieran tenido. Esto les ha permitido darse cuenta que el ritmo de vida que llevaban antes no les beneficiaba y han introducido cambios beneficiosos en su día a día.

 

Las dos caras de las redes sociales

Desde marzo, las redes sociales se convirtieron en un espacio donde cientos de usuarios compartían recetas saludables y rutinas de ejercicio para mantenerse o ponerse en forma mientras estaban encerrados en casa. Twitter e Instagram, entre otras redes sociales, se convirtieron en esferas de presión y exigencias sociales para las personas que padecen un TCA. Marta padece bulimia nerviosa desde los quince años, para ella las redes sociales son su mayor enemigo porque le llevan a comparar su cuerpo y hábitos con los de otras mujeres. Además. existe una tendencia cada vez más presente de promocionar productos o alimentos que te ayudan a bajar de peso como tés, batidos e incluso pastillas.

Enfrentándote a la báscula

Miedo al peso/Raúl Jiménez Vicioso

Alimentos adelgazantes/Raul Jiménez Vicioso

 

En el otro lado de la balanza, existen cuentas de Instagram como la de María o la de Vicky, centradas en dar visibilidad y crear consciencia sobre un problema que afecta ya a muchísimas personas. «Es a la vez una herramienta para la exigencia de ciertos cánones o modos de vida pero también son fundamentales para conseguir cambiar la mentalidad de la sociedad», apunta la psicóloga. María muestra en sus redes sociales fotos de su proceso, «soy consciente de que ver a una persona que ha llegado hasta ese extremo puede incitar a otros, pero yo intento servir de ejemplo para que no lleguen hasta ese punto», cuenta.

Sin embargo, la realidad es que las redes sociales son solo una herramienta, son los usuarios los que crean el entorno. «Yo recomiendo a mis pacientes que se den la oportunidad de experimentar qué es lo que sienten cuando ven un mensaje que no les convence», explica Ferrándiz. Instagram, como todas las redes sociales, funciona por algoritmos, es decir, te muestra el contenido que más buscas o con el que más interactúas. Es posible «personalizar» las publicaciones que quieres o no quieres ver. «No hay duda ninguna de que las redes sociales están jugando un papel negativo en los Trastornos de la Conducta Alimentaria, aunque podrían jugar un papel positivo si se utilizaran bien. Sin embargo, la realidad en la consulta muestra que determinados perfiles muy influyentes crean miedos hacia ciertos alimentos y promueven un tipo de belleza irreal», apunta la psiquiatra Pilar López.

 

Vivir con un TCA en España

El sistema de salud mental público español está muy masificado. Cuando un paciente es detectado con un TCA debe ser atendido y tratado lo antes posible. En España los tiempos de espera no permiten un seguimiento eficaz. La cantidad de personas afectadas es muy grande y la pandemia ha generado un colapso aún mayor. No existe un dispositivo específico para tratar los TCA en cada hospital, el número de profesionales dedicados a este aspecto es muy bajo. «El número de psiquiatras y psicólogos que existe en el sistema de salud español es insuficiente para atender todo el malestar que existe en la población. Debería haber planes de salud mental centrados en prevenir y promocionar, sino el número de casos no va a dejar de aumentar», añade XXX.

El nivel de conciencia de la población en cuanto a enfermedades mentales se refiere también es muy bajo. Es frecuente la asociación de términos como «locura» o «estilo de vida» con este tipo de patologías.  

Ni los Centros de Educación Infantil y Primaria ni los Institutos de Educación Secundaria Obligatoria tienen implementados oficialmente en sus programas informar a sus estudiantes sobre salud mental. ADANER se encarga desde hace años de organizar charlas educacionales desde quinto de primaria. Tratan los TCA desde un punto de vista positivo para evitar poner en riesgo a personas vulnerables. Sin embargo, solo pueden cubrir un porcentaje muy pequeño de todos los colegios e institutos de Madrid.

¿Recuperación?

La salud mental no es un problema puntual que hay que arreglar y no vuelve. Igual que la mayoría de personas tiene que ir al médico más de una vez en su vida, la salud mental es solo un campo más de la medicina. No obstante, sí existe la posibilidad real de recuperarse al 100% de un Trastorno de la Conducta Alimentaria, lo cual no quiere decir que un paciente de estas características no vaya a necesitar un acompañamiento psicológico a largo plazo.  «Ahora mismo estoy en una etapa en la que no pienso mucho en qué como ni  cuánto como, aunque siempre hay pensamientos en mi cabeza respecto a cómo de mal veo mi cuerpo o si he engordado o no», cuenta Marta.

 

El sufrimiento tras comer

Bulimia nerviosa/Raúl Jiménez Vicioso

La recuperación es posible, sin embargo, depende de diversos factores que, muchas veces, no dependen del paciente. Un punto fundamental es que la persona reciba tratamiento regularmente, lo que en muchos casos es complicado por la escasez de medios del sistema. Por otro lado, dentro del tratamiento es imprescindible que se genere conciencia del problema para poder solucionarlo,

No todos los TCA deben ser medicalizados, ni mucho menos ingresados. Pero todos ellos necesitan ser entendidos desde su trastorno porque tuvo un origen que lo justifica.

 

25 Comments

  1. Muy interesante y realmente informativo. Enhorabuena por el trabajo realizado.

  2. Muy interesante y realmente informativo. Es un tema que sin duda debe darse todavía más a conocer. Enhorabuena por el trabajo realizado.

  3. Esperemos que llegue el día en el que la salud mental en España esté al alcance de todos, de igual forma que para alguien con problemas de salud física. Casos como los de María y Marta no pueden pasar desapercibidos. La gente necesita concienciarse más de que estos problemas existen. Muy buen reportaje.

  4. Muy interesante, habeis hecho un gran trabajo

  5. No solo es un reportaje interesante sino que se nota que se han utilizado fuentes fiables y autorizadas. Es un problema muy grave hoy en día y es importante que se le de voz. Enhorabuena!

  6. Me parece muy interesante este tema, porque hay muchos jóvenes que lo padecen y todos deberíamos concienciarnos.

    • Muy interesante el artículo. Bien documentado y presenta el problema de frente.
      Excelente exposición y trabajo.

  7. Muy buen reportaje. A la juventud hay que informarle de los temas con mucho cariño para que no lo tomen a la inversa. En el tema de la alimentación hay mucho que cambiar, y más aún por aprender. Enhorabuena 👏

  8. Muy buen reportaje. Como ya dijeron, informativo y comprometido con la veracidad y las fuentes fiables.
    ¡Bien hecho!

  9. muy interesante, desgraciadamente demasiadas personas sufren de trastornos así hoy en día…

    • Muy interesante un gran trabajo

  10. Debería haber más reportajes como este, para que los jóvenes, se conciencien que no hay que seguir los estereotipos que nos marca la sociedad, para ser felices y sentirse bien. Solo hace falta formas a nuestros jóvenes, para que sigan una vida sana.

  11. Muy interesante un buen trabajo

    • “Se convirtieron en esferas de presión y exigencias sociales”, no solo desde marzo, sino desde su misma aparición es algo que ha ido expandiéndose. La “nueva” lacra de la sociedad de la información, una más.

  12. Excelente trabajo explicando desde la raíz el problema. Muy bien!!

  13. Es una vergüenza las redes sociales en estos asuntos, que existan grupos que fomenten este tipo de prácticas debería esta penado por la ley.

    Buen trabajo

  14. Mui interesante excelente trabajo.

  15. Excelente reportaje. Muy bien documentado y redactado. Expone a la perfección un tema controvertido como son los TCA, cada vez más frecuentes y muy poco conocidos en la población. Como pediatra, estoy completamente de acuerdo con las palabras de la doctora López: existe una absoluta escasez de psicólogos y psiquiatras en España para poder tratar de forma adecuada al gran número de pacientes con TCA y otros trastornos psiquiátricos, especialmente aquellos que comienzan en la edad pediátrica.

    Hace falta visibilizar este tipo de trastornos, darlos a conocer y concienciar a la población para conseguir realizar un diagnóstico precoz y poder iniciar el tratamiento lo antes posible.

    Muy buen trabajo. Enhorabuena a los autores.

  16. Gracias por compartir y dar más visibilidad a este tema. Vivimos en una sociedad complicada, y dar transparencia a estos temas es vital. Especialmente entre el público más joven y más susceptible a contenidos, que en mayor o menor medida, repercute en nuestro bienestar y salud mental. Gracias por este gran trabajo!

  17. Este artículo es muy recomendable, muy interesante y además está realmente bien explicado. Muchas gracias por su elaboración a los autores y enhorabuena por el trabajo realizado.

  18. Bravo!

    • Un buen articulo que pone de manifiesto una problemática a menudo invisibilizada en los medios de comunicación,pero que afecta a muchas personas que necesitan saber que no están solas y pueden ser ayudadas.

  19. Excelente artículo, bien documentado y bien relatado.
    Enhorabuena a los autores!

  20. Tratar temas tan importantes como los TCA no es nada fácil… Lo habéis hecho genial, enhorabuena por dar a conocer este problema y las diferentes caras que tiene. Enhorabuena!

  21. Súper interesante. Un tema muy importante. Qué explicado y qué bien documentado. Gracias por darle voz a este tipo de trastornos. ¡Enhorabuena!

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